Comercio
Los juegos tradicionales y de mesa son los más vendidos a raíz de la pandemia
Muchas jugueterías de Reus destacan los puzzles y los juegos clásicos como los más solicitados en las cartas a los Reyes Magos
Las jugueterías de Reus tienen mucho trabajo con el fin de ayudar a preparar todos aquellos regalos que los niños y niñas encomiendan en sus cartas a los Reyes Magos y los puzzles y juegos tradicionales son los más solicitados este año.
El inicio del confinamiento obligó a todo el mundo a pasar tres meses encerrados en casa, un hecho que trajo cosas positivas como pasar más tiempo con la familia y jugar con el fin de entretenerse durante tanto tiempo. Fue entonces cuando los juegos de mesa volvieron a coger sentido de entre las cajas que los guardaban, ya que las nuevas generaciones de niños acostumbran a preferir aparatos electrónicos antes que una partida al Trivial.
Este segundo año de pandemia, a pesar de las recientes complicaciones y restricciones aplicadas poco antes de las fiestas, el sector mantiene la esperanza y la ilusión de mantener el ritmo de ventas de juguetes como hasta ahora y de poder recuperar así la esencia de los juguetes tradicionales a pesar de haber una clara demanda en novedades que varían según el año. «Los juegos de mesa, familiares y educativos se han duplicado a raíz del inicio de la pandemia, sobre todo desde que estuvimos confinados», ha explicado Javier Segú, propietario de la tienda Joguines Segú, ubicada en la Calle Llovera.
A pesar de haber mucha demanda de los juguetes de moda, algunos incluso agotados, como las muñecas Rainbow, un cerdito interactivo llamado My Little Pig Pet o bien artículos relacionados con videojuegos como el Among Us, Minecraft o Fortnite, entre otros, los juegos de mesa, puzzles y juguetes de carácter más tradicional destacan notablemente este año, según comenta Meritxell Barberà, gerente de la tienda Tomàs Barberà situada en la plaza del Mercadal: «Nosotros vendemos un juguete más clásicoy educativo, mayoritariamente de madera y que potencia la creatividad de los niños».
Los productos de sagas comoHarry Potter, Star Wars o Pokémon son apuestas seguras que cuestamucho que pasen de moda y, cada año, las figuras, libros, material escolar, peluches o múltiples accesorios de estos tienen salida enlas jugueterías donde, también, la gente pide artículos un poco peculiares: «Juegos familiares como el Cacachaf, una especie de Twister donde el objetivo principal es no aplastar un excremento de plástico» es un ejemplo, tal como comenta entre risas Javier Segú.
También hay más inclusividad hacia el género, sin hacer tantas distinciones a la hora de comprar, y más cooperatividad: «Tenemos juegos que no tienen ganador y se trata de llegar a un resultado en común o bien muñecas con síndrome de Down, por ejemplo», comenta Barberà.
Actualmente, la campaña de Navidad se adelanta bastante en el calendario. Durante el mes de noviembre, junto con descuentos especiales que se hacen en campañas como el Black-Friday, ayuda a mantener las ventas estables, pero «todavía no llegan al ritmo de antes de la pandemia» según comenta Pau Salvadó, director de la tienda JoguinesSomnis Reus en el Pallol, quién también recalca la afectación en el sector por la baja natalidad. «Los niños siempre querrán juguetes por mucho que la tecnología esté presente, pero si cada vez hay menos niños habrá juguetes que no se venderán al mismo ritmo», añade.