La fórmula reusense para hacer vino en casa

Lluís Pallejà Pi era de oficio calderero. Hijo de Falset, por su trabajo viajaba a menudo por la comarca. A finales de la década de los años 60, tuvo la idea de elaborar concentrado de uva a la misma ciudad de Reus, poniendo en marcha así un negocio que, con el tiempo, se fue haciendo grande, hasta el punto que fue necesario trasladar la producción en Riudoms, donde Concentrats Pallejà todavía tiene la sede. Allí, la empresa despuntó en la producción de concentrado de uva, algarroba e higo, y en el mercado del Home-Winemaking o Vinificación casera, una práctica muy extendida a los países nórdicos. Con los kits Concentrats Pallejà, el cliente tenía bastantes de mezclar el concentrado con agua, añadir las levaduras y esperar que fermentaran.

Aquel negocio que arrancó el abuelo Lluís y continuó su hijo, ahora tiene al frente dos representantes de la tercera generación de la familia, Xavi y la Xell Pallejà. Los dos son enólogos y tienen sus propias bodegas en el Priorat, pero no han querido renunciar a mantener en activo la empresa familiar.

Entre las líneas de negocio de Concentrats Pallejà, además de los kits para hacer vino, vermú, sangría y sidra, también se siguen elaborando los concentrados de algarroba, higo y uva, con la novedad que, además de venderlos a granel, también despachan arropes embotellados en pequeñas cantidades. «Son productos gourmet para tenerlos en la cocina e ir jugando», detalla la Xell. Así, explica, «el arrope de uva se puede utilizar como sustituto del vinagre de Módena, es como un caramelo de uva que puedes poner en la ensalada, en una coca de escalivada... El de higo también da mucho juego. Siempre lo habíamos vendido a granel para la elaboración de vermúes porque aporta mucho aroma y color, pero también se puede utilizar por ejemplo a las ensaladas, o en uno carpaccio de buey. Y, si gusta el salado con un punto dulce, puede ir muy bien con las carnes blancas, como el pollo». Con respecto al arrope de algarroba, la Xell explica que este es un producto que todavía despierta algunas reticencias en el público local, no así en otros países, donde la algarroba se utiliza por ejemplo en la torrefacción del café o para endulzar postres. Así y todo, el grueso del negocio son la venta a granel y los kits de Winemaking. Con respecto a los kits para hacer bebidas, lo que trabajan más a día de hoy es el de manzana, con mucha salida a Inglaterra, explica la Xell. También tienen tirada los de vermú y sangría, productos los tres que sacaron al mercado durante el reciente confinamiento.

En cuanto a la empresa, la emprendedora admite que al frente de Concentrats Pallejà, ella y su hermano han pasado «épocas de todo, unas muy buenas y otras no tanto», pero que tanto ella como Xavi ven que el negocio tiene futuro y «mucho potencial para crecer». Además, subraya, «al ser una empresa que viene de los abuelos, teníamos que seguir adelante», y se muestra convencida que pronto podrán empezar a pensar en la expansión.