Limpieza
Vecinos de Reus apuntan al incivismo como a causa de la aparición de plagas
El barrio Fortuny, Pelayo y Mas Iglesias aseguran tener más palomas, bichos, ratas y colonias de gatos
Algunos barrios de la ciudad han visto cómo aumentaba el número de gatos, pero también como cada vez más, las plagas –de palomas, ratas o cucarachas– provocan problemas. Según los vecinos, el aumento de plagas se debe al incivismo de muchos ciudadanos, con gestos como dejar la basura a pie de calle, no cerrar bien las bolsas de los residuos o recoger y limpiar los restos de comer en ciertos espacios verdes, públicos y de ocio.
El secretario de la Asociación vecinal (AVDA) de la zona Pelayo, Andrés Emir, asegura que «las calles y sobre todo en los parques de la zona, tenemos cada vez más gatos». «Supongo que con la presencia de los felinos, los ratones de campo y las ratas no aparecen tanto», añade. Emir considera que el crecimiento de la colonia de estos animales se origina por la gente que deja restos de comida en las esquinas de las calles.
Esta visión es compartida por la Cori Balaña, presidenta de la AVDA del barrio Fortuny: «La gente acude a los parques y, la mayoría a veces, no recogen nada. Los restos de comida se quedan encima del césped, el suelo, mesas y bancos y, en consecuencia, las palomas se esparcen mucho más, generando al mismo tiempo más suciedad y desperfectos con sus excrementos».
Algunos vecinos del barrio Mas Iglesias se quejan de los problemas que les generan las cucarachas y las ratas. «Normalmente, ves más cucarachas en verano, sobre todo por la noche, pero a veces a plena luz del día te las encuentras en la acera. Sucede lo mismo con las ratas, algunas muy grandes te pillan desprevenido cuando quieres tirar la basura. El susto y la angustia del momento no tiene la quita nadie, no es nada agradable», asegurauno de los vecinos del barrio.
El incremento de las diferentes plagas preocupa los vecinos de la zona, los cuales ya han trasladado las quejas correspondientes al Ayuntamiento, pero consideran que la causa es por el incivismo de la ciudadanía, más que por el servicio y mantenimiento que realiza el consistorio.
Según Balaña: «El equipo de limpieza ya está haciendo un refuerzo importante con el servicio, y más ahora que cuentan con nueva maquinaria, pero si el resto de personas no colaboran y tienen cuidado con pequeños gestos diarios, el problema no se solucionará nunca y costará, todavía más, controlar las plagas». Los portavoces de las diferentes zonas afectadas inciden en la responsabilidad que tiene la ciudadanía, con el fin de conseguir una ciudad más limpia y cívica. «Tampoco se trata de un nivel de plaga como si eso fuera el cuento de El flautista de Hamelin, no obstante es evidente que tiene que haber un equilibrio, y depende mucho de cada uno de nosotros construir una ciudad más limpia y mantenerla con empatía en escala social», ha dicho Emir.