Familias de Reus sin plaza en preescolar denuncian la mala gestión de Educación

Un grupo de familias reusenses siguen a la espera para saber si obtendrán una plaza eneducación infantil para sus hijos en alguna de las escuelas que solicitaron en la preinscripción. Lo que ha pasado en muchas casas es que los niños no han entrado enla primera opción, a pesar de tener los puntos necesarios, y tampoco en los otros siete colegios delorden de preferencia. Eso ha provocado que se asignaran otros centros que no están cerca de casa o no son del gusto de las familias. Parte de la culpa, según las familias, es la reducción de ratios que ha impulsado la Generalitat de Catalunya para este curso, que ha dificultado el acceso de sus niños a preescolar, hecho que las angustia por la incertidumbre de no saber a qué centro educativo llevarán a su hijo, cuando sólo quedan dos semanas para que empiece el curso. Fuentes del departamento de Educación aseguran que todos los niños que participaron en la preinscripción tienen una plaza asignada, pero que es inevitable que no esté en el centro que se pedía.

Una de las familias angustiadas –de la cual se preservará su anonimato– es la de una niña que solicitó plaza para la escuela Maria Cortina, en primer lugar, y otros siete más. Con la modificación de la ratio máxima de alumnos en las aulas de P3, este centro ofrece 23 plazas para este curso, dos de estas reservadas para alumnado con necesidades educativas especiales. Esta familia obtuvo los mismos puntos que otras treinta y, por lo tanto, se tuvo que hacer a sorteo, pero la niña quedó fuera por pocos números. Después de este procedimiento, todas las otras opciones que había en la lista de preferencias estaban llenas de las otras familias. Los servicios de escolarización le ofrecieron otra plaza en tres escuelas concertadas y cuatro públicas, pero «de estas ninguno nos queda cerca de casa y tampoco son escuelas de las cuales tengo buenas referencias», explica la madre. Ante esta situación, prescribieron a su hija en una de estas posibilidades, pero no tiraron la toalla para poder entrar a su hija en la escuela que querían desde el primer momento y no la matricularon enla otra opción.

A partir de este momento, esta familia y otros que se vieron en una situación casi idéntica reclamaron a Educación una opción para poder ampliar las clases. Allí supieron que Educación está, actualmente, investigando unos presuntos seis casos de fraude y más de uno de estos podrían estar en la escuela solicitada. El fraude en las preinscripciones escolares es bastante recurrente desde hace años y consiste en empadronar o falsear datos del empadronamiento para obtener más puntos a la hora de hacer las preinscripciones.

El hecho de que puedan echar atrás la matrícula de alguna de las familias del centro, hace que la de esta niña pueda tener esperanzas para entrar, pero «es preocupante porque quedan dos semanas y no sé dónde irá mi hija». Así, la principal queja que tiene la madre es la falta de información y avances en la gestión por parte de la comisión de Educación tarraconense. Nos dijeron que sabríamos alguna cosa al principio de julio y estamos a mediados de agosto y no ha sido así, no tengo matrícula. Son trabajadores públicos y no dan respuesta a loque la población le pedimos».

Según el departamento, la lista de espera está en plazo hasta el 2 de septiembre, donde puede haber algún movimiento de alumnado. Ahora bien, se tiene que tener en cuenta que además de la modificación de ratios, también se cambió el calendario escolar y este año el curso por primaria e infantil empezará el día 5 de septiembre. Sin embargo, inspección, que investiga los fraudes, tiene hasta el día 30 de septiembre para expulsar algún alumno por falsear los datos, hecho que comporta que el curso puede empezar y, como no es educación obligatoria, los padres no obtendrían la plaza que quede vacía hasta entonces.

La reducción de la ratio se iniciará en los grupos de Infantil 3 (P3) y, progresivamente, se irá desplegando en el resto de cursos. Con respecto a la reducción de ratios por debajo de 25 alumnos por aula, lo han aplicado el 99% de los públicos y de manera voluntaria el 73% de los grupos concertados de toda Cataluña. Para compensar la pérdida de plazas, el consejero de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, anunció que se crearían unos 450 grupos de P3. En total, el próximo curso se ofrecerá un total de 3.113 grupos entre escuela pública y concertada, 25 grupos más que el año anterior, aunque el alumnado disminuye en 3.500 alumnos. El departamento defiende que esta reducción favorecerá la atención a las necesidades del alumnado, ofrecerá más oportunidades a los profesores para desarrollar nuevas habilidades y metodologías y permitirá ladetección precoz de las necesidades de aprendizaje que puede prever futuros abandonos. Los padres están de acuerdo con una mejor atención para sus hijos, pero reclaman ser informados de su proceso de inscripción porque «la incertidumbre es dura».