La oposición en Reus critica la poca información recibida sobre la parálisis del CAIF

Los grupos municipales del PSC, Ciudadanos y la CUP aseguran no estar informados por el Gobierno del motivo de la parálisis del proyecto del Centro Acuático y de Fitness de la ciudad (CAIF) y sospechan que han surgido problemas con la empresa adjudicataria, Dúo Spa & Sports SLU.

Cinco meses después del plenario que aprobó la formalización del contrato con la empresa, los socialistas y los naranjas tienen la percepción que el incremento de los costes en el ámbito de la construcción y el desabastecimiento del material puede haber perjudicado el proceso de la formalización, ya que creen que habría podido retroceder.

Fuentes municipales, sin embargo, afirman que la formalización sigue el procedimiento establecido con normalidad y que se está trabajando para acordar todos los aspectos jurídicos de un contrato «de gran complejidad, dada su naturaleza, longitud y trascendencia, porque prevé tanto la proyección como la construcción y la explotación del equipamiento».

Según las mismas fuentes, «el Ayuntamiento confía en cerrar todos los aspectos y formalizar el contrato pronto». El plenario del consistorio que se celebró en abril aprobó la formalización del contrato la empresa adjudicataria, sin embargo, casi cinco meses después, todavía no se ha firmado. El grupo municipal de la CUP se negó desde el primer momento al presupuesto de la concesión del servicio, ya que considera que es un gasto público muy elevado –de 82.000 euros– para que una empresa lo gestione. Edgar Fernández, portavoz del grupo, también crítica que «el plan de viabilidad económica, que contemplaba a 4.000 abonados al mes, a un precio mínimo de 60 euros al mes, era de todo menos viable y no había plan de impacto medioambiental».

Fernández asegura que «sólo se presentó la empresa Duet Sports y, por lo que hemos visto, acostumbra a acabar en los juzgados denunciando que no gana los beneficios previstos en proyectos similares. No sé si han empezado a tener problemas».

Para Andreu Martín, portavoz del PSC, que sólo se presentara una empresa «no es un hecho tranquilizador, como hemos denunciado en varias ocasiones». Martín añade: «Es sorprendente que, con sólo una empresa presentada y una vez ya adjudicadas las obras, todavía no se haya formalizado el contrato».

El portavoz socialista también piensa que la parálisis del contrato no se habría producido si la iniciativa hubiera sido pública, entre el Ayuntamiento y Reus Esport i Lleure, y «podríamos haber buscado la implicación de otras administraciones, como el Consell Superior d'Esports», apunta.

En el caso de los socialistas, la preocupación recae en el hecho de que «el error del Gobierno nos puede dejar sin un equipamiento público durante un tiempo importante, accesibleal perfil de ciudadanos que la necesitan y que optan por marcharse a piscinas públicas de municipios próximos», explica el portavoz.

Con respecto a la inquietud de Ciudadanos, el primero de los motivos que destacan es la falta de comunicación del Gobierno hacia los grupos municipales: «No es admisible que el Gobierno no informe de los motivos que provocan el retraso en la formalización, porque este comporta también un retraso en la ejecución y su puesta en marcha», explica Débora García, concejala del partido naranja.

Se trata de uno de los grandes proyectos del mandato actual, del que se calcula un presupuesto de 8 millones de euros. Ahora bien, el Ayuntamiento pagará un máximo de 1,4 millones de euros, mientras que la explotadora tendrá que aportar los otros 6,6 millones restantes.