Urbanismo
La Comisión de Urbanismo no aprueba el Plan Especial Urbanístico del Reus Ploms
El club tendrá que cambiar algunas cuestiones técnicas y volver a presentar el plan, hecho que pospone las reformas de las instalaciones a finales del 2023
La Comisión Territorial de Urbanismo del Camp de Tarragona no aprobó ayer el Plan Especial Urbanístico para la ordenación de los usos y de la edificabilidad del Club Natació Reus Ploms, ya que faltan algunos detalles en las cuestiones más técnicas del proyecto, como el ajuste de la volumetría.
Sin embargo, la directora de los Servicios Territoriales de Vicepresidencia, Políticas Digitales y Territorio, Trinitat Castro, explicó al Diari Més que el proyecto se ha visto «con buenos ojos entre la comisión» y «sólo tienen que cambiar algunos aspectos».
Estos cambios suponen que el retraso que ya acumula la puesta en marcha de las reformas del club se incremente, ya que el plan tendrá que ser aprobado, de nuevo, por el pleno del Ayuntamiento y por la Comisión Territorial. Esta demora conlleva que, aunque las obras de la residencia podrán empezar cuando sea aprobado, las actuaciones de reforma del club no llegarán, al menos, hasta el último semestre del 2023. Tan pronto como se apruebe el plan urbanístico, la empresa compradora del equipamiento comunitario, donde ubicará una residencia, podrá pedir la licencia de obras y empezarlas. Ahora bien, aunque el club tendrá que tirar al suelo parte de sus propiedades, las reformas en sus instalaciones no llegarán hasta finales del 2023: «siendo muy positivos, podrían empezar a finales del verano del año que viene», señalaba Isidre Guinjoan, presidente del club.
El pasado mes de junio, cuando el pleno del Ayuntamiento aprobó, de manera provisional, el Plan Especial Urbanístico del club, el presidente Guinjoan veía lógico que la Comisión del Campde Tarragona también la aprobaría, sin embargo, unos meses después, la obviedad se ha disuelto y ahora esta pide que se ajusten algunos de los datos del proyecto.
La intención actual es que se puedan presentar en la próxima Comisión, dado que «no son cuestiones que necesiten mucho tiempo». El Plan Especial Urbanístico del Ploms marca un cambio de calificación en un área de 2.800 metros del terreno total, que pasará a ser de equipamiento comunitario, mientras que ahora es de equipamiento deportivo.
Otros proyectos enla Comisión
La Comisión Territorial de Urbanismo también echó atrás tres proyectos más de la ciudad. Según explica Castro, el Plan Parcial de Granja Gil, ubicado entre la T-11 y el estadio de fútbol del Reus Deportiu, es un proyecto del Ayuntamiento para convertir el espacio en una zona residencial, pero la comisión lo desestimó porque «no ve la necesidad» y ha pedido que el consistorio haga un nuevo plan parcial que «tenga conexión con el entorno».
Las modificaciones del plan parcial de un sector de Aigüesverds tampoco cumplen el planteamiento urbanístico de esta urbanización y, por lo tanto, es otro de los puntos que no fue aceptado en la comisión de ayer. Finalmente, el Ayuntamiento también presentó una reforma del plan parcial de Mas Sunyer enfrente de la necesidad de hacer las parcelas más grandes. El proyecto también gustó a la comisión, sin embargo, igual que en el caso delPloms, se tienen que llevar a cabo algunas modificaciones técnicas.