El Parlament da apoyo a Mohamed Said Badaoui después de su detención

La Junta de Portavoces del Parlament ha aprobado una declaración para mostrar su apoyo al activista Mohamed Said Badaoui, que fue detenido este martes por una orden de expulsión que tenía pendiente desde el verano. La Policía Nacional inició el proceso para expulsarlo alegando un supuesto extremismo religioso y radicalismo fundamentalista. Badaoui hacía más de 30 años que residía en Reus. En el texto que ha aprobado la Junta con el apoyo de ERC, Junts, la CUP y los comunes denuncian su detención, aseguran que es víctima de «la represión política y la islamofobia del Estado» y creen que el procedimiento ha sido «irregular». Además, critican que los motivos alegados son «infundados» y que se lo acusa sin pruebas, sino en base a «suposiciones».

En el texto critican que no se ha iniciado ningún procedimiento judicial para presentar y evaluar pruebas de las sospechas y por lo tanto constatan que se ha vulnerado sus derechos fundamentales. Concretamente, señalan que se ha vulnerado varios artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos porque se lo ha condenado sin juicio público, se ha cometido un ataque contra su reputación y honor y se ha vulnerado su derecho a escoger residencia.

Los grupos que impulsan la iniciativa critican la ley de extranjería y sus «procedimientos opacos» y han instado al Gobierno a «activar todas las herramientas administrativas, jurídicas y diplomáticas» para velar por el respeto a los derechos fundamentales de los afectados por esta norma. Además, han reiterado que hay que derogar la ley de extranjería, como el Parlament ha aprobado en varias resoluciones.

Vox asegura que es «una amenaza para la seguridad nacional»

La aprobación de esta declaración sólo ha contado con el apoyo de ERC, Junts, la CUP y los comunes. El líder de Vox en Cataluña, Ignacio Garriga, ha aprovechado el debate en la comparecencia el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que se ha celebrado antes que la Junta de Portavoces que ha acordado la declaración, para oponerse.

Para el presidente del grupo de extrema derecha la declaración es para «dar apoyo a un potencial terrorista» y ha asegurado que «es una persona que representa una auténtica amenaza para la seguridad nacional y de los ciudadanos». Garriga ha remarcado que los diputados que impulsen la declaración «se convertirán en cómplices de cada matrimonio forzado y cada vertido de sangre en la región».

La vicepresidenta primera en funciones de presidenta del Parlament, Alba Vergés, lo ha llamado a la orden y le ha recriminado que «haga estas afirmaciones «sin ser juez, ni saberlas- ni poder hacerlas» y le ha reclamado que sus intervenciones se ajusten al decoro.

Por su parte, justo antes de la lectura de la declaración institucional el portavoz parlamentario de Ciutadans, Nacho Martín Blanco, ha intervenido para hacer constar que es «una anomalía» que durante el pleno se haga lectura «de acuerdos que no son declaraciones institucionales» y ha señalado que la iniciativa «no tiene la unanimidad de las fuerzas».