Más de 660 jóvenes de Reus piden la ayuda para el alquiler de la Generalitat

Más de 660 jóvenes reusenses solicitaron la ayuda de la nueva línea que abrió la Agencia de la Vivienda de Cataluña para pagar el alquiler. La convocatoria del Bo Lloguer Jove, que finalizó el día 7 de octubre, iba destinada a las personas menores de 36 años y, a diferencia del Bo Lloguer Jove del pasado mes de junio, no iba por orden de llegada, sino que se priorizará entre los expedientes de los participantes.

La ayuda puede llegar a los 250 euros mensuales, pero el importe dependerá de los ingresos de la unidad de convivencia y el esfuerzo económico que les supone el pago de alquiler. La solicitud se podía hacer por vía telemática o bien presencialmente, acudiendo a la oficina de vivienda de la plaza del Baluard, en el caso reusense.

De los 663 jóvenes que lo han pedido en la ciudad, 227 solicitudes se presentaron presencialmente y 436, telemáticamente. Fuentes municipales apuntan que la previsión es que la Generalitat las resuelva antes de finales de año. Ante el incremento del coste de vida en general y las dificultades de los jóvenes para poder marcharse de casa, la consejera de Derechos Sociales, ViolantCervera, aseguró que el bono joven del Estado se quedó pequeño. Por este motivo, la Generalitat invirtió 29 millones de euros para repartir ayudas de hasta 250 euros entre los jóvenes.

Sergio Lozano, vecino de Reus de 26 años, es uno de los solicitantes de esta convocatoria: «Hoy en día, si quieres ahorrar es prácticamente imposible pagando los gastos y el alquiler, la ayuda me servirá para poder hacerlo y hacerme autónomo en unos años». Lozano participó también en la convocatoria del pasado mes de junio, pero no se le concedió.

Dado que se trata de una ayuda para dar respuesta a los jóvenes que se quedaron sin la subvención del Bo Lloguer Jove del Estado, aquellos que sí que lo han recibido no se pudieron adherir a esta segunda convocatoria. Este es el caso de Josep Sugranyes, que sigue en tramitación del bono del Estado y ya explicaba al Diari Més, cuándo lo pidió, que no estaba de acuerdo con la manera de gestionar la ayuda, porque se otorgaba según la orden en el que se presentaban las solicitudes.

Este es uno de los defectos que también encontraba Cervera y, por eso, en esta convocatoria se ha establecido una concurrencia competitiva para poder priorizar y estudiar todos los expedientes de las personas jóvenes solicitantes, y no se concederán por orden de llegada.

Otra de las diferencias entre las convocatorias es que en el estatal, los solicitantes reciben una cantidad fija de 250 euros durante dos años, a no ser que haya más de una solicitud en una misma vivienda, ya que el importe de la ayuda no puede superar la cuota de alquiler. En cambio, las ayudas de la Generalitat son variables en función de lo que se paga y de lo que se ingresa y son para un año. En el caso catalán, el importe final será de un mínimo de 20 euros y de un máximo de 250 euros, que se adjudicarán en función de los ingresos.

Otro de los casos reusenses que han solicitado la Ajuda al Lloguer Jovees el de Mar Sardà, que tiene 25 años y comparte piso en la ciudad. Sardà no presentó la solicitud en la otra convocatoria «porque no tenía todos los documentos preparados». En esta segunda oportunidad, «todo ha sido mucho más sencillo porque, aparte de tener la documentación, el proceso estaba mucho mejor explicado».

La única complicación que tuvo es que le pedían los recibos del alquiler de los últimos seis meses y, a pesar de independizarse hace más de un año, se ha engalanado recientemente y no contaba con bastantes recibos. Por este motivo, se puso con contacto con el 012 y pudo completar «rápidamente» los trámites.