Equipamientos
La rehabilitación del Mas Totosaus de Reus se retrasa por la complejidad de la obra
Aunque las obras, que se tenían que acabar en octubre, siguen en marcha, el gobierno confía en que pueda funcionar en el 2023
Las obras de rehabilitación del Mas Totosaus, un antiguo maset ubicado en el camino de Riudoms, para transformarlo en un nuevo Servicio de Atención y Orientación a las Familias, van con retraso. El consistorio preveía que las obras finalizaran en el mes de octubre, sin embargo, ocho meses después de su puesta en marcha, a causa de dos imprevistos, según fuentes municipales, no se han terminado.
Según las mismas fuentes, la principal causa del retraso es la complejidad de la obra, ya que la restauración del suelo de la masía ha resultado ser más compleja y dificultosa de lo que se preveía en un comienzo. Además, una modificación del proyecto, que hace referencia a su segunda fase, en la que los técnicos están trabajando desde hace unos meses, también ha comportado que las obras no se hayan acabado en el plazo previsto. Esta fase incluye la colocación de una rampa, en lugar de un ascensor, que seguirá permitiendo que sea un espacio accesible.
Ambos acontecimientos han modificado los plazos de la rehabilitación, pero el consistorio desconoce la fecha precisa en la que se podrán dar por finalizadas las obras. Con respecto al mobiliario urbano del interior, el Ayuntamiento está preparando en paralelo, su licitación para que el equipamiento pueda entrar en funcionamiento a partir del 2023, tal como estaba previsto.
La empresa adjudicataria que está realizando la rehabilitación es Construcciones Asensio SL., con un presupuesto de 199.900,71 euros (IVA incluido). A pesar del retraso de las obras, el Ayuntamiento asegura que no se ha producido ninguna incidencia con la empresa, sino que ha sido debido a problemas difíciles de prever, como el estado del suelo de la masía.
Se trata de una masía modernista, del arquitecto reusense Pere Caselles, que tiene un alto interés histórico y patrimonial, pero que, los últimos años, como estaba en desuso, se había ido degradando. Con la finalidad de conservar el patrimonio y darle uso, el gobierno municipal licitó la rehabilitación del edificio para destinarlo a un servicio municipal, como es el de Atención y Orientación a las Familias, que hasta ahora se ha concentrado en el Mas Pintat y que, cuando se abra el nuevo Mas Totosaus, que se prevé que sea a principios del 2023, se ampliará en este otro punto de la ciudad.
Esta descentralización del servicio fue una petición expresa de las personas que participaron en la elaboración del Plan de las Familias y la acción está incluida en el Plan de Atención a las Familias, aprobado en mayo de 2022.
Para conservar la estructura del edificio, la rehabilitación está consistiendo en la adecuación del espacio interior, adaptando los nuevos usos que se harán a las salas que ya existían. Por ejemplo, la sala central será un espacio polivalente y de reuniones, mientras que las dos salas posteriores se destinarán a despachos y la salita contigua al porche de la entrada será un almacén.
Con respecto al exterior, el acceso y el porche se conservarán, aunque se instalará una reja metálica para evitar intrusiones. El único derribo que se llevará a cabo será la de unos tabiques y unos armarios situados en la fachada oeste, ya que se ubicará el nuevo lavabo, donde antes se encontraba la cocina de la casa. Sin embargo, los arquitectos han intentado no modificar y desvirtuar la volumetría exterior del edificio.