Rubio apela al municipalismo real en la presentación como alcaldable

Daniel Rubio tenía muy clara cuál tenía que ser su carta de presentación: el «municipalismo real». Quería demostrar que está al lado de la ciudadanía, que la escucha, y que no la olvidará a partir del 29 de mayo. El candidato de Ara Reus se encargó de dar la bienvenida, uno por uno, a todos los asistentes que se personaron en la Sala Santa Llúcia para presenciar el acto en que se proclamaba, oficialmente, como alcaldable. El saludo fue correspondido por dos centenares de banderolas ondeando en el aire mientras se acercaba al escenario.

Ara tu, ara Daniel, es uno de los lemas de la campaña. Rubio quiere que la población sea partícipe de su proyecto, desde el minuto uno. Ayer, propuso un juego. A través de la web menti.com, los asistentes podían comentar los aspectos que más les preocupan sobre el estado de la ciudad. Las opciones más escogidas fueron seguridad ciudadana, empresa y economía, bienestar social y medio ambiente.

Aseguró que Reus es una ciudad segura, afirmó que la plantilla de la Guardia Urbana tiene que llegar a los 200 agentes y apeló a la industrialización y a la creación de latifundios parcelarios para «generar riqueza» y atraer grandes empresas logísticas. «No podemos perder un minuto», alegó. También sugirió abrir una casa de los oficios del sector de la construcción y crear un gabinete exclusivo en el consistorio para recaudar fondos europeos. Asimismo, recuperó proyectos que había planteado el partido municipalista en el pasado y que no se han concretado nunca. Rubio destacó que en caso de que no prosperen las negociaciones entre el Ayuntamiento y la Iglesia para la cesión del Centro Católico, propondría el establecimiento de la Casa de la Cultura en el barrio del Carme. También añadió proyectos como la reconversión del entorno de la estación de tren para construir el «Reus Central Park», un «pulmón verde con viviendas».

No obstante, el concejal de Medio Ambiente y Recursos Humanos aprovechó la ocasión para empezar a desmarcarse del equipo de gobierno. «Yo tengo dudas. Este movimiento me genera muchas dudas», dijo sobre el traslado del Mercado del Carrilet. Se mostró favorable a qué el Ayuntamiento incremente el patrimonio –propuso construir viviendas sociales en la avenida del Carrilet–, pero alertó sobre dos interrogantes que sobrevuelan la operación: la viabilidad logística de la nueva ubicación y el futuro de los paradistas.