Concluye la primera fase de las obras de ampliación del Centro de Lectura de Reus

La fase constructiva de las obras de ampliación del Centro de Lectura ya ha concluido. Muy pronto, se iniciará la etapa de adecuación del interior de las instalaciones y de distribución de los espacios. «Estamos trabajando con el objetivo que las actuaciones acaben en septiembre. No sé si, entonces, ya se podrá utilizar todo, pero vamos avanzando», valora el presidente de la entidad, Lluís Miquel Pérez. Los trabajos, consistentes en la construcción de un edificio de 1.000 metros cuadrados anexo al actual, empezaron a finales del 2020, con la voluntad de empezar el curso 2022-23 con las nuevas instalaciones ya operativas. No obstante, el aumento de precios de los materiales y las condiciones meteorológicas de la última primavera ocasionaron un primer retraso. La siguiente previsión era que el edificio quedara terminado a finales de año.

«Las obras van a su ritmo. Menos rápido de lo que querríamos, pero están cumpliendo. En el tema de la construcción, todo acaba tardando más de lo que piensas, pero eso no es una cosa que nos haga cambiar las expectativas», comenta Pérez, quien añade que la calle de la Puríssima Concepció, donde se ha efectuado la primera fase de la intervención, es «una ubicación muy mala para trabajar, una calle estrecha».

La segunda fase de la ampliación, que empezará muy pronto, prevé la adecuación del interior de los nuevos espacios para dejarlos listos para acoger actividades de cualquier tipo. Entre otras operaciones, se prevé completar las instalaciones eléctrica y del aire acondicionado, así como colocar ventanas herméticas, para no molestar a los vecinos si se acogen actuaciones musicales.

«Lo que queremos ganar es polivalencia y más espacio para la danza. El leitmotiv del edificio es este», expresa el presidente del Centro de Lectura. En los nuevos espacios, señala que se instalarán aulas, la cafetería y salas polivalentes para acoger exposiciones, conferencias y varias actividades. Pérez añade que, en la actualidad, para celebrar presentaciones en el salón de actos, ya están dando fechas para mayo porque prácticamente la totalidad de la agenda está completa.

Con todo, queda un último quebradero de cabeza que marcará los últimos tramos de las obras: la financiación. «Para la culminación total, como los materiales han subido de precio, nos falta una pequeña parte», revela Pérez, quien, al mismo tiempo, asegura que se está «negociando» para poder paliar el déficit.

Los trabajos tenían, originalmente, un coste aproximado de 500.000 euros. Una parte de esta cantidad fue abonada por la entidad con la venta de una casa que estaba en desuso y, otra, a partir de ayudas de la Diputación de Tarragona, el Ayuntamiento de Reus y la Generalitat de Catalunya.