«El futuro del SEO pasará por la inteligencia artificial»

Asier López (Reus, 2002) ha sentido desde bien pequeño pasión por la informática. Su padre trabajaba en el mundo del SEO, optimizando páginas web para que salgan en los primeros lugares de Google, pero a él no le atraía la idea. Fue durante la adolescencia que cambió de opinión, para conseguir posicionar el portal sobre física que había creado.

En el 2019, fundó FullSeo y, este año, la Escuela Europea de Empresa ha determinado que es una de las 50 mejores agencias del sector en España. En concreto, ocupa la posición número 22. Forbes ha compartido el listado. Ya ha colaborado con empresas como Porsche, LG y Oreo.

— ¿Hay mucha competencia en el sector del SEO en España?

— Hay muchas empresas. Por ejemplo, uno de los conceptos más competidos en Google es «agencia SEO». En España, hay miles. Lo que pasa es que muchas personas son freelance. De estas, en Reus habrá decenas. Nosotros experimentamos, hicimos una buena estrategia y hemos podido crear nuestra metodología. Empezamos a posicionar al cabo de un año. «Es mucho», puedes pensar. No, es muy poco. El SEO es un trabajo a largo plazo.

— Incluso las empresas buscan contratar gente con un mínimo conocimiento de SEO...

— Sí. Cada vez la gente busca más en Google, compra más por Internet y la vida es más digital. Ahora ha salido ChatGPT, una inteligencia artificial (I.A.). El futuro del SEO pasará por la I.A. Hay gente que piensa que el SEO morirá. La gente que sabe sabrá adaptarse, sabrá pasar el SEO a la I.A. Nosotros ya estamos preparando una metodología y estamos experimentando. Podemos escoger la I.A. como enemiga o como aliada. La queremos como aliada. Este será el futuro del SEO.

— ¿Cómo ha evolucionado Usted en este sector?

— Recuerdo que cuando hice la primera web, durante el ciclo medio de informática, contacté a unas 30.000 personas por Instagram, diciéndoles: «Soy un estudiante que quiero practicar haciendo webs y las hago supereconómicas, a 400 euros». No tenía ni idea de cómo podía captar clientes. Me eliminaron la cuenta por enviar mensajes masivos, pero de estas 30.000 personas, hubo una veterinaria que me dijo: «De acuerdo, probémoslo». Con el tema del SEO, el primer cliente que tuve me pagaba muy bien para la experiencia que tenía, 450 euros al mes. Ahora, estoy cobrando 1.000. Es el mismo servicio. Busco marcas más grandes o más consolidadas, que tengan un presupuesto mayor, que puedan permitirse pagar más. Es más responsabilidad para nosotros, más trabajo técnico, pero que podemos alcanzar. Intento buscar menos clientes y más beneficio.

— Pagar miles de euros por optimizar una web parece caro...

— Si hace cuatro meses me dijeran que trabajaría con un cliente por 1.000 euros al mes, le preguntaría si le gusta estafar a la gente. Se trata de la mentalidad y de la propuesta de valor que hagas. Lo más importante para un emprendedor es leer y aprender. He ido a Madrid solamente para hacer entrevistas a las mejores agencias de SEO y les he preguntado: «¿Cómo lo has conseguido?». También es muy importante saber vender y tener una mentalidad poderosa. Cuando te lo crees, lo harás. Yo, antes, no me lo creía. Cobraba 300 euros, lo normal. Ahora, cobro 1.000, y lo mínimo son 500. No es lo mismo lo que se hace con 1.000 euros que lo que se hace con 300. El trabajo es mucho más elevado, es más responsabilidad, pero cuando cobras tan caro, el cliente valora más el trabajo, te ve con mejores ojos, te ve más profesional.

— ¿Cuál es el futuro de FullSeo?

— Mi objetivo es ser la mejor agencia de SEO de España en cuanto a resultados y facturación. No la más grande, sino la mejor. También, tener un equipo grande, de 50 o 100 personas. Ahora, somos unas ocho o nueve. Una vez consiga todo eso y sistematice la empresa, adiós. Pondré un director general y la empresa, si todo va bien, funcionará sola. Y yo, con suerte, y con mucho esfuerzo, cuando tenga hijos, podré dedicar el tiempo a mi familia.

— ¿Se ha fijado un plazo para alcanzarlo?

— Siempre me marco plazos. Antes de tener hijos. Yo creo que puede tardar entre cinco y ocho años. Para delegar a la empresa entera, ocho años. Para tener libertad y designar a un director para la empresa, cinco años, ya que necesitará dos o tres más para asimilar mi manera de trabajar.