Comercios de Reus sufren actos vandálicos esta Semana Santa

Los negocios ubicados en la calle Major y en su entorno han vivido una Semana Santa para olvidar. Entre el viernes y el domingo, se registraron un robo y dos fuegos, una conjunción de hechos que ha llevado a algunos propietarios a plantearse pedir más presencia policial o la instalación de cámaras de videovigilancia.

El primer delito se produjo el viernes a las 7.25 horas; un robo cometido antes de que los responsables del negocio abrieran el local. «Nosotros no habíamos tenido nunca ningún problema, pero otros tenderos tienen bastantes historias que explicar», valora uno de ellos.

La madrugada del domingo, a las 4 horas, los Bomberos recibieron un aviso por parte de los Mossos d'Esquadra en el que se les alertaba de que un fuego originado en unos cartones entre la calle Major y calle de la Puríssima Concepció estaba afectando a un toldo. Una dotación se trasladó al lugar de los hechos para acabar de apagar las brasas, dado que la llama ya se había prácticamente extinguido, y remojar el área. No hubo heridos y la operación duró unos 30 minutos.

«Una vecina me dijo que, por la noche, había sido imposible dormir por el ruido que había en la calle, con gritos y discusiones», expresa el responsable del local, que asegura que el primero que se preguntó al ver el estado de la tela fue «¿otra vez?». Con anterioridad, ya le habían entrado a robar en el negocio y le habían roto un cartel que hay en la puerta de entrada, cogiéndole el fluorescente de su interior.

«El centro de Reus se está complicando por culpa del vandalismo y el incivismo», añade. Este propietario considera que, si fuera la primera vez que pasa un hecho parecido, se resignaría y pensaría que le ha «tocado», pero al haberse repetido en más de una ocasión y en otros lugares de la zona, cree que se trata de alguien que quiere «hacer daño al centro de Reus» o, incluso, «al alcalde».

El domingo por la mañana, los regentes de un local de la calle de la Racona también se despertaron viendo que habían calcinado tres de sus parasoles. «Todavía suerte que fue por la noche», comentan.

Otro establecimiento de la calle Major señala que, recientemente, intentaron entrar a robar en un piso del barrio y forzaron el acceso a un negocio limítrofe. «Llevamos una racha... Pedimos urgentemente que pongan videovigilancia, esta zona queda bastante desamparada», expresan.

Otros locales proponen más presencia policial. En noviembre del año pasado, comercios de la calle Major ya denunciaron el aumento de robos que se había sufrido desde el verano, motivo por los que exigían medidas para detenerlo.