La convocatoria del Reus Espais Vius se amplía hasta finales de noviembre

El Ayuntamiento de Reus ha decidido ampliar la convocatoria para acceder a las subvenciones vinculadas a las dos primeras fases del proyecto Reus Espais Vius hasta el 30 de noviembre, que anteriormente concluía el 31 de mayo. El concejal de Empresa y Ocupación, Carles Prats, detalla que la decisión responde a dos motivos principales. El primero es el hecho de que el importe destinado a las ayudas todavía no se ha agotado. «El modelo de negocios que se está implantando hace que las inversiones sean bajas porque, en general, se realizan obras o reformas de poca envergadura en los locales», explica el edil.

Además, se quiere que los emprendedores que están recibiendo asesoramiento y los que se puedan sumar en un futuro a la iniciativa «dispongan del tiempo suficiente para finalizar la definición del proyecto y las obras de los locales». «Por lo tanto, con esta ampliación, queremos sacar el máximo provecho de las partidas presupuestarias disponibles», concluye Prats.

Los beneficiarios de las ayudas son las empresas que abran un negocio de triple impacto –con compromiso social, económico y medioambiental– en el ámbito comprendido por los arrabales de Robuster, de Sant Pere, de Martí Folguera y del Pallol o en la plaza de la Puríssima Sang y que tengan que invertir un mínimo de 4.000 euros para la puesta en funcionamiento del establecimiento. Quedan exentas las compañías que hagan un traslado de actividad o un cambio de local. Además, se mantiene la financiación de 250.000 euros para la iniciativa, que cubrirá hasta un 50% de las inversiones, con un tope de 20.000 euros.

Comida para llevarse

En estos momentos, en la primera fase de actuación –en los arrabales de Robuster y de Sant Pere-, se han abierto siete locales y siete más se instalarán en los próximos meses. Con respecto al segundo ámbito, que incorpora el arrabal de Martí Folguera y el entorno del Pallol, el 25 de marzo se abrió el primer establecimiento –La Cuina de Montse– y ya hay diez personas que están recibiendo asesoramiento.

Montse Montalvo es la propietaria del primer negocio abierto en la segunda fase, en la plaza de la Puríssima Sang, una tienda de comida para llevar que elabora platos salados y dulces. La inauguración coincidió con la previa de Semana Santa, cosa que hizo que fuera «de culo» preparando monas y figuras de chocolate. A estas alturas, la situación se ha estabilizado. «Va viniendo la gente y repite, que es lo mejor», expresa Montalvo.

Incluso, una antigua cliente del restaurante que regentaba en Riudoms le ha preguntado si volverá a hacer unos postres elaborados con queso de cabra y dulce de membrillo. Fue en verano del 2022 cuando se interesó por abrir un local en Reus y, a pesar del proceso de las obras, agradece el asesoramiento recibido por parte de los técnicos, que le han ayudado a inscribirse a un curso para aprender a gestionar una empresa.

Toni Salamone es el emprendedor que está a punto de inaugurar un horno de pan y pizzería «al estilo italiano» en el arrabal de Robuster, también para llevar. Si todo va bien, será a principios de mayo cuando suba la persiana. Con el objetivo de alcanzar los criterios de triple impacto, señala que sólo se utilizarán productos de proximidad, que se utilizará cartón como envoltorio, que colaborarán con una cooperativa local que les proporcionará avellanas y aceite y que promoverán la contratación de madres solteras de entre 25 y 40 años. Además, afirma que el local actuará como Punto Lila.