El plenario de Reus renovará un 48% de sus concejales y volverá a tener siete grupos municipales representados

La cuenta atrás para conformar el ejecutivo ya ha empezado. El 17 de junio es la fecha fijada para constituir los ayuntamientos. Hasta entonces, tiene lugar una carrera contrarreloj para pactar, dado que será imperioso entenderse con otras formaciones políticas si se quiere gobernar con estabilidad, tranquilidad y, el quid de la cuestión, mayoría absoluta.

De momento, en el tablero sólo se han movido los peones. «Siempre quien ha ganado las elecciones es quien inicia los contactos», comenta la cabeza de lista de ERC, Noemí Llauradó. Asegura que, a estas alturas, el PSC no se ha puesto en contacto con ellos, pero señala que «desde Esquerra continuamos firmemente convencidos de que podemos seguir construyendo a favor de los reusenses, culminando las bases de la transformación que hemos iniciado».

Sandra Guaita sale desde la pole position. Ayer tarde, la ejecutiva local socialista se reunía para trazar la hoja de ruta. «A partir de hoy, emplazaremos al resto de grupos», afirma la candidata. Subraya que hablarán con «cualquier grupo con representación excepto Vox» para buscar puntos de unión. «Intentamos sumar, que es lo que la ciudadanía nos pide», continúa. A diferencia de su homólogo en Tarragona, Rubén Viñuales, Guaita no se plantea gobernar en solitario. «Cuanta más gente se sume al proyecto de ciudad, más enriquecido será», concluye.

A la espera de recibir la llamada de los socialistas, Llauradó no descarta luchar por conseguir la alcaldía. «Se pueden explorar otras opciones para conformar una mayoría alternativa», declara. Sin embargo, cree que «la prudencia es la mejor consejera» y quiere analizar la jugada antes de dar un paso en falso. Hay que recordar que ERC, Junts y Ara Reus sólo suman doce concejales y, por lo tanto, necesitarían una cuarta fuerza para alejar al PSC del poder.

La primera a lanzar una propuesta fue la alcaldable de la CUP, Mònica Pàmies. Ya en la noche electoral, instó a Llauradó a negociar para establecer un gobierno de izquierdas e independentista y, al mismo tiempo, evitar una coalición entre republicanos, Junts y PSC. Por su parte, Sílvia Virgili y Sebastià Domènech, del PP, se comprometen «a trabajar con responsabilidad durante estos cuatro años».

Altas y bajas

Mandato nuevo, composición nueva. Sólo 14 de los 27 concejales que concluyeron la legislatura 2019-2023 volverán a dar forma al plenario municipal. Además, serán representados siete partidos políticos en vez de seis. La caída de Ciutadans ha favorecido la aparición de Vox y el resurgimiento del PP.

La fuerza más votada y la que parte con ventaja para conquistar la alcaldía es, de hecho, la que más cambios vivirá. Si bien Anabel Martínez y Daniel Marcos son los únicos integrantes de la actual plantilla del PSC en el consistorio, no se puede decir que las seis incorporaciones sean debutantes. La alcaldable Sandra Guaita será una de las caras nuevas, pero ya tiene una amplia experiencia en el Ayuntamiento. Fue el 2021 cuando dejó el acta de concejala para centrarse en la tarea de diputada en el Congreso.

Otro retorno lo protagonizará la número 5 de la candidatura, Pilar López, quien fue concejala durante el mandato de 1995 a 1999. El comunicador Josep Baiges, el abogado laboralista Manel Muñoz, la expresidenta de la asociación de vecinos del barrio Gaudí, Mar Escoda, y Enrique Martín, trabajador público en Correos y secretario general de UGT servicios públicos en la provincia de Tarragona, se encargarán de suplir las bajas de Hèctor Fort, Tania Agudo, Isaac Bonillo y Andreu Martín, primer secretario del PSC en Reus.

El segundo partido que sedujo a más electores fue ERC. Será una de las dos excepciones que no presentará novedades. Los cinco miembros de la candidatura han sido concejales en la actual legislatura. No repetirá Òscar Subirats, número 6, quién había liderado el departamento de Salud y Ciudadanía. La representación de Junts perderá un referente como Carles Pellicer, que deja la alcaldía después de doce años. Con él, un histórico del partido como Hipòlit Monseny también dará un paso al lado después de dos décadas en la administración pública. En el último mandato, ha sido concejal de Desarrollo Urbano y Vía Pública. La formación postconvergente tampoco contará con Pere Aluja. Sustituyó a Montserrat Vilella como encargado del área de Bienestar Social, pero un accidente pocos días después de asumir el cargo marcó su paso por el Ayuntamiento. Teresa Pallarès, Montserrat Caelles, Mariluz Caballero y Josep Cuerba continuarán en sus asientos y tendrán como nuevo compañero al arquitecto Joan Carles Gavaldà, número 2 de la lista electoral.

Con Vox debutando en el plenario reusense, incorporará tres caras nuevas al terreno de juego. La figura central del proyecto es el abogado Julio Pardo Rodríguez. Lo secundarán Francisco Javier Vaquero, cofundador de SCC en Reus y jefe de cocina en una empresa multinacional, y José Ruiz, agente funerario. El resurgimiento del PP traerá un debut y un viejo conocido. Después de perder la representación en 2019, los populares tuvieron que hacer un ejercicio de introspección y reflexión para determinar el rumbo a seguir. La profesora de música y directora coral Sílvia Virgili es la nueva capitana del barco, pero tendrá de mano derecha el veterano Sebastià Domènech. Su currículum en el Ayuntamiento se remonta al 2003.

Daniel Rubio tenía las expectativas altas y la decepción era palpable la noche electoral. A pesar de mejorar en cuanto a número de votos, Ara Reus mantendrá a los dos concejales que ya ha tenido en las últimas tres legislaturas. Dolors Vázquez, concejala de Seguridad, Convivencia y Civismo en el mandato que cierra, continuará en el consistorio, pero no podrá entrar al técnico en gestión de recursos naturales y paisajísticos Albert Piñol, una de las apuestas para intentar alcanzar el anhelado número tres que se está resistiendo.

La CUP será el partido que cerrará el plenario. Completado el ciclo, Marta Llorens y Edgar Fernández han dado un paso al lado para postular a Mònica Pàmies como portavoz del proyecto anticapitalista, que incorpora a Arnau Martí, miembro del Casal Despertaferro y profesional de hostelería. El apartado de bajas lo completan los concejales de Ciutadans, Débora García y Ricardo López, y Raúl Meléndez, no adscrito después de dejar, precisamente, el grupo municipal liberal.

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