«Los premios Gaudí Gresol reconocen la excelencia y estimulan el talento»

—Esta noche se celebra la gala de entrega de los premios Gaudí Gresol. ¿Cómo se presenta la cita?

—Muy bien. Podríamos decir que la entrega de los premios Gaudí Gresol es el día D de la fundación. Es la actividad más social de Gresol. A lo largo del año, hacemos muchas actividades, pero tienen un carácter más profesional. Con los premios, queremos resaltar personas que han tenido una notoriedad a la sociedad y una excelencia por su actividad. Pensamos que es bueno que se conozca y que se estimule.

—Tan importante como premiar la excelencia es promoverla.

—Exactamente. A la Fundació Gresol pretendemos estimular el talento. La excelencia es un objetivo al cual nunca se acaba de llegar del todo, pero tenemos que aspirar.

—Hábleme de los galardonados de esta edición.

—Cada año seleccionamos a diez personas que, por su trabajo, son realmente merecedoras de este reconocimiento. En la categoría de liderazgo empresarial, premiamos a Antonio Cañete, quien aparte de sus éxitos empresariales, como presidente de PIMEC está consiguiendo animar el sector empresarial catalán. En el ámbito de la tecnología y la innovación, reconocemos a Àurea Rodríguez, que es experta en este ámbito, ha tenido varios cargos de responsabilidad en instituciones europeas que promueven la innovación. Su perfil es especialmente destacado porque el mundo tecnológico sigue siendo predominantemente masculino. También tendremos a Josep Ametller, del grupo Casa Ametller. En este caso, ponemos en valor su apuesta por el medio ambiente con la puesta en marcha de un nuevo modelo de producción agroalimentaria sostenible en el Penedès. Es un proyecto espectacular con una inversión muy importante.

—Son diversos los premiados del ámbito de la cultura.

—Efectivamente, en la categoría de artes escénicas, premiamos a la actriz Ivana Miño, por su talento y sus buenas interpretaciones tanto en cine como en teatro y televisión. Galardonamos a Maria de la Pau Janer en el ámbito de la literatura, y Juan Antonio Bayona, director de cine conocidísimo por películas comoEl orfanato o Lo imposible , porque consideramos que es un gran valor dentro del cine. Y también tenemos entre los premiados una joven prometida como es Mariona Escoda, la ganadora de la primera edición de Euforia.

—¿Quién acaba de completar la lista?

—Nombre destacados como la divulgadora Elsa Punset, en la categoría de Comunicación; el doctor Eduard Estivill, un personaje muy mediático por su tarea de investigación, tratamiento y divulgación del sueño; y, por último, como Catalana Ilustre, premiamos a Esther Giménez-Salinas, una figura destacada en el mundo del derecho que actualmente es la Síndica de Greuges. Tenemos una diversidad de perfiles y de disciplinas que harán que, nuevamente, la gala de entrega sea una jornada con muy de relieve.

—Si se da un repaso a los galardonados a lo largo de los 16 años de trayectoria de los premios, son muchas las personalidades que han recibido a un Gaudí Gresol. ¿Contar con estos nombres ha servido para dar más prestigio a los premios?

—Sin duda. De hecho, cuando enseñamos la lista de premiados que acumulamos a lo largo de las 16 ediciones, todo el mundo queda parado porque son personalidades de alto nivel.

—Aunque la gala está abierta a todo el mundo, a menudo se tiene la percepción que es un acto restringido a un público muy concreto, empresarios, personas destacadas del mundo de la política y la vida social del territorio. ¿Es este uno de los retos o de las barreras a superar de los premios?

—En ningún momento queremos estar cerrados, todo al contrario, queremos estar bien abiertos a toda la sociedad civil. Lo llevamos a nuestro ADN. Quizás el hecho de llevar gente muy relevante ha generado en algún momento la idea de que es un acto restringido. Es un acontecimiento abierto a todo el mundo, donde se tiene la oportunidad de saludar, de charlar un rato e, incluso, de hacerse alguna fotografía con personalidades que estamos acostumbrados a ver en la televisión y a la cual no podemos acceder normalmente. Es una jornada bonita que celebra la notoriedad y la excelencia.

—Como siempre, la cena posterior a la entrega de los premios es solidaria. ¿A qué organización se destinarán los beneficios este año?

—Este año repartiremos los beneficios entre dos organizaciones, Down Tarragona y FEM-Fundación Esclerosis Múltiple. Aquí lo más importante es generar conciencia. Hace falta ayudar en este tipo de entidades y promover más la solidaridad.

—¿Cree que el hecho de premiar la excelencia hace que se acabe identificando Reus y su entorno con estos valores?

—Conseguirlo es bueno. Considerar que Reus promueve estas virtudes y asimilar la excelencia con la ciudad y con todo el ámbito de la Catalunya Nova, que es el ámbito geográfico que engloba la Fundació Gresol, es una buena noticia.

—Mencionaba ahora la zona de influencia geográfica que queda bajo el paraguas de Gresol. ¿Por qué la Catalunya Nova?

—Catalunya Novano es ni una comarca, ni una provincia. Tenemos una geografía amplia que va desde el Barcelonès hasta el Ebro, incluyendo territorios de las provincias de Barcelona, Lleida y Tarragona. A pesar de que el concepto de Catalunya Nova sea sólo una expresión cultural, da una sensación de amplitud. Como fundación empresarial, queremos romper las fronteras y promover la apertura a todos los ámbitos. Y eso se puede ver con las actividades que organizamos a lo largo del año, que son itinerantes. La gala de los premios Gaudí Gresol siempre se hace Reus, pero el resto de actos van eructando. Tenemos una vocación itinerante, porque queremos promover que participe gente de todos los puntos del territorio dentro de nuestro ámbito de influencia. Un ejemplo claro de eso son las Jornadas Económicas que organizamos anualmente, en la cual invitamos a ponentes de primer nivel. En las últimas ediciones las hemos hecho en Tarragona, a la marina Port Tarraco, pero antes las habíamos organizado Salou, en Cambrils, en el Vendrell, en Valls, en Tortosa. Es una actividad muy enriquecedora. De hecho, todas las actividades que hacemos están encaradas a promover el talento y el aprendizaje en todos los ámbitos. Tenemos que ser aprendices toda la vida.

—¿Qué otras actividades organizan a lo largo del año?

—Aparte de los premios Gaudí Gresol y las Jornadas Económicas, cada mes organizamos una comida coloquio, en el cual invitamos a un ponente de nivel, principalmente vinculado al mundo de la empresa, que hace una charla y después se abre un turno de preguntas. Procuramos escoger invitados con perfiles variados para conseguir que sea una actividad enriquecedora para nuestros socios. Además, organizamos visitas y viajes empresariales. La semana pasada, por ejemplo, visitamos el Sincotró Alba, en Cerdanyola del Vallès, que es un complejo de aceleradores de electrones, que conforman la infraestructura científica más importando del Mediterráneo. A título particular, sería muy difícil poder acceder y hacer este tipo de visitas, pero vehiculándolas a través de la fundación y como grupo, se abre la posibilidad. En todo eso, hay que sumar que tenemos otros premios.

—¿Cuáles serían?

—Por una parte, tenemos los premios Gresol Jove, que apretaban el talento emprendedor en los ámbitos tecnológico, marketing y académico. En este caso, contamos con un jurado que está formado por representantes de la URV, de la Diputación y de Ibercaja. De la otra, tenemos el premio GranGresol, que es el máximo reconocimiento que entregamos, y que pone en valor figuras destacadas con una relevancia internacional. Este año, lo damos al doctor Luís Rojas Marcos, que es psiquiatra e investigador de prestigio y ha desarrollado su actividad en la ciudad de Nueva York.