¿A quien no ha dicho nunca 'me quiero fundir'?
La compañía Se'ns va l'olla estrena este sábado en la Sala Santa Llúcia de Reus 'Historias cortas en espacios cerrados', una obra de Vicenç Cañón
Encontrarte con una mujer por la calle, que te saluda toda efusiva, y no recordar, ni porel mal de morir, quién es aquella persona. Criticar sin piedad a alguien y descubrir que tu interlocutor es un familiar suyo. Llevara la madre a un restaurante de diseño y que a la mujer lo encuentre todo ridículo. Esta, y muchas otras situaciones de la vida cotidiana que nos ha hecho pensar me querría fundir, conforman la obra Historias cortas en espacios cerrados , escrita por el tarraconense Vicenç Cañón, que será representada, este mismo sábado 8 de julio, a las 20 h., en la Sala Santa Llúcia de Reus. La obra irá a cargo del grupo se nos va la olla, de Vila-seca. Se trata de una compañía amateur formada por una docena de actrices que hizo los primeros pasos vinculada al Casal de la Mujer, pero que, en la actualidad, ya funciona como compañía independiente. Al frente, asumiendo las funciones de directora, está Elisabeth Quevedo.
La pieza que han escogido para este estreno busca la complicidad del público, que fácilmente se ve reconocido en las escenas planteadas. Se trata de una comedia, de una hora y media de duración, que se desarrolla con una escenografía minimalista, de manera que las grandes protagonistas son las actrices y sus interpretaciones. Todo, con la voluntad de ofrecer lo que el autor denomina Teatro en estado puro .
Vicenç Cañón escribió Historias cortas en espacios cerrados el año 2012 y fue estrenada por la compañía de teatro tarraconense 45 RPM. Desde entonces, la pieza se ha representado casi ininterrumpidamente por Cataluña y España, pero también en países como México, Chile o Argentina. «Es una obra que me está dando muchas alegrías. Ahora no hace mucho, me han pedido traducirla al gallego», afirma Cañón. El actor, director y monitor de teatro explica que, desde que la escribió ahora hace más de una década, ha ido haciendo actualizaciones del texto, tanto porlos cambios que ha experimentado la sociedad, como porel hecho de que la obra se va adaptando a la compañía que lo interpreta: «La misma obra puede ir cambiando mucho, según si la hace un grupo u otro. Vas cambiando frases, actitudes. Voces que una actriz es muy cómica y puede dar más, o que, al contrario, es muy seria y sientepudor de decir alguna palabra con doble intención... Al final, el teatro es algo vivo».
En el caso del estreno del sábado, Vicenç Cañón admite que irá a ver la representación con la curiosidad de ver qué trabajo ha hecho la directora con su compañía. El autor asegura también estar viviendo «un momento espléndido» con respecto a la repercusión de su trabajo, que se puede leer y descargar a su página web.
Las entradas para la función del sábado en la Sala Santa Llúcia se pueden comprar a través de la web de Entrapolis, y tienen un precio de 10 euros.