El Club Petanca Reus pide una carpa para poder jugar a la sombra

«Fue bastante duro jugar al sol, pero no había alternativa». De esta manera define Josep Caballé, presidente del Club Petanca Reus, la situación vivida durante la melé del día del socio, el pasado junio. «No es estar al sol un ratito, sino que te pasas toda una mañana, con movimiento y tensión, porque, quieras o, no quien juega, siempre quiere ganar», continúa. Teniendo en cuenta que cada vez hace más calor, el presidente de la entidad pide que se instale una carpa sobre las pistas del Mas Carandell.

Caballé comenta que no se trata de una reclamación específica del club, sino que ha escuchado que también lo quieren pedir asociaciones vecinales, por ejemplo, para las fiestas de barrio. En su caso, recuerda que asistió a un concierto en la plaza de Anton Borrell en el marco de la Fiesta Mayor y, a pesar de empezar a las 19 horas, explica que «fue horrible» y que «todo el mundo se fue arrinconando intentando buscar la sombra». A diferencia de estos ejemplos, el presidente de la entidad recuerda que se necesitaría la pérgola «durante todo el verano, que cada vez se va alargando», y no para un momento puntual.

En concreto, la idea de Caballé es que la carpa abarque el número más grande posible de las ocho pistas de las que disponen las instalaciones. Si no las cubriera todas, se podrían plantear turnos para que nadie tuviera que pasar toda la jornada bajo el sol. En estos momentos, a los jugadores se les da la posibilidad de ir a entrenar al parque del Mas Carandell, pero el presidente afirma que «cuesta» que la gente lo acepte porque, a pesar de estar a escasos metros de las pistas reglamentarias, «es como aislarte».

Otra alternativa es situarse en la sombra y practicar entre los árboles, entre las pistas y el local social. Con todo, el club ha tenido que prohibir jugar los sábados, cuando se disputan los torneos oficiales y se acumula más gente. «Prohibimos jugar bajo los árboles porque era peligroso para quien tira, que tiene que estar concentrado en la gente de los alrededores, y por quien se mueve», subraya Caballé.

Una última opción durante el verano es organizar melés nocturnas. Ya se programó una con motivo de las fiestas del barrio Gaudí, que empezó a las 21 horas y no acabó hasta entrada la madrugada. El presidente del club de petanca considera que las partidas tendrían que empezar un poco antes, por la noche, pero quiere reunirse con representantes de la corporación municipal para valorar la posibilidad de hacer un par de torneos más cuando el sol se está poniendo.