Empresa
La Cambra de Comerç de Reus asesora 28 empresas sobre las ayudas para retirar amianto
La corporación ha ayudado a tramitar las subvenciones de siete de las compañías interesadas
La Cambra de Comercio ha asesorado a 28 empresas sobre las ayudas para retirar residuos de materiales de aislamiento y de construcción que contengan amianto, convocados por la Agencia de Residus de Catalunya y el Departament d'Acció Climàtica. De estas, siete han completado los trámites para presentar la solicitud con el apoyo de la corporación. El gerente de la Cambra, Jaume Llosas, explica que el origen de este programa de orientación es que las compañías «no acostumbran a tener gente especializada en estos temas», cosa que provoca que se lancen a pedir subvenciones sin acabar de leer las bases y, a veces, no cumplan los requisitos para ser elegibles». Desde la Cambra, se hacía un estudio preliminar para analizar si la sociedad –o el particular– en cuestión reunía las condiciones necesarias para presentarse a la convocatoria y, de esta manera, no perder ni tiempo ni recursos al crearse «falsas expectativas».
Llosas comenta que, con este asesoramiento, «se han encontrado de todo». Algunas empresas tenían ya un proyecto preparado y presupuestado y sólo necesitaban verificar las bases para pedir las ayudas. Otros, partían desde cero y la Camaba las ha ayudado a reunir la documentación y a ponerse en contacto con compañías especializadas para saber el coste de la operación.
Entre el grupo que no llegó a tramitar la petición, se encuentran las corporaciones que no cumplían los requisitos, por ejemplo, para tener deudas con Hacienda o Seguridad Social –una exclusión procedente de la ley general de subvenciones–, y aquellas que han decidido esperar a una futura convocatoria porque, en este momento, no les iba bien completar el proceso. Incluso, en estos últimos casos, la asesoría les permitió saber «cuál es el máximo de ayuda» y «que lo cumplían todo», de manera que afrontarán el proceso más adelante con más tranquilidad.
En esta línea, Llosas remarca que se llegó a un acuerdo con Banco Sabadell para hacer una reserva de crédito de 10 millones de euros para las empresas del ámbito de actuación de la Cambra, con el fin de adelantar el dinero de la subvención, dado que, una vez se conozca la resolución, el cobro puede tardar seis meses o un año «y sólo tienes 27 meses para justificar por qué te los han dado». «De esta manera, hacemos que las empresas, si ya tenían un plan de inversiones y no habían previsto la retirada del amianto, o la instalación de placas fotovoltaicas, no tengan que desviar capital que tenían destinado a otras inversiones», valora el gerente.
Llosas recuerda que «tenemos dos deadlines » respecto a la retirada de amianto: en 2028 no puede quedar ningún residuo en los edificios públicos y el 2032 es la fecha límite aplicable para cualquier edificación. Por este motivo, prevé que se vayan convocando diferentes subvenciones para promover que empresas y particulares actúen para descontaminar las instalaciones. Además, considera que ahora «es buen momento» para hacerlo porque las convocatorias permiten financiar parte de la operación.
La Cambra presentó el 16 de junio el acuerdo territorial Erradicamos el amianto de nuestras empresas, con el objetivo de dar información previa a las organizaciones interesadas en adherirse a las ayudas –el plazo se cerró el 25 de julio– hacia el cumplimiento y adecuación a los criterios de elegibilidad que establecen las bases. Asimismo, se ponía a disposición para cursar los trámites ante la administración. Concretamente, la corporación reusense, tal como señala Llosas, se dirigía a los operadores del sector agrícola que trabajan con los productos de la avellana, los huevos, la almendra y la algarroba, ya que la Agència de Residus quería, sobre todo, dar apoyo a las pequeñas instalaciones y al sector primario.