La AV Joan Prim de Reus exige que se limpie el interior y la persiana de su local

La asociación de vecinos (AV) Joan Prim celebrará, del 15 al 17 de septiembre, sus particulares fiestas de barrio. A pesar de las ganas de compartir unos días de hermandad, el presidente de la entidad, Eusebio Párraga, está nervioso. No es, sin embargo, fruto de la emoción. «De aquí poco tendrá que venir la gente al local social para sacar los tickets para los actos que haremos y me da pena que lo vean así, pensarán que no lo cuido», expresa Párraga. La persiana está oxidada y llena de polvo, el peldaño que da acceso a la sede está roto y el interior está habitado por cucarachas.

Párraga explica que, en teoría, una persona se encarga de limpiar la sede, si bien «yo no la he visto ni un solo día». Comenta que no es cuestión que ahora pueda estar de vacaciones, sino que ya hace meses que se arrastra el problema. Además, según Párraga, el anterior presidente de la AV «no se ocupaba de la higiene». «Yo me he encontrado con eso y creo que el Ayuntamiento se tendría que hacer cargo del asunto y hablar con la empresa de limpieza», apunta. En el caso de la persiana, cree que con una limpieza en profundidad y una capa de pintura no haría falta tocarla en doce meses. «Eso se tiene que solucionar, es insalubre», dice.

Para empeorar las cosas, hace semanas que el agua está cortada en el local social a falta de completar una revisión. Unos técnicos advirtieron a Párraga que «se estaba perdiendo mucha agua» en las instalaciones y él cerró la corriente por precaución, a la espera de efectuar las reparaciones correspondientes. «Todavía estoy esperando que vengan, supongo que habrán visto que ya no se pierde agua y que ya no hay prisa», valora.

La totalidad de los actos de las fiestas organizadas por la asociación de vecinos se realizarán justo en medio del paseo de Prim. Sin embargo, Párraga explica que, si se acondicionara bien la sede social, en un futuro se podrían hacer partidas de cartas, dominó o parchís en su interior. «Son cosas que querríamos hacer, pero, tal cómo está ahora el local, no queremos hacer nada dentro», comenta.

El presidente de la AV Joan Prim también comenta un par de desperfectos que ha detectado en el barrio y que todavía no se han solucionado. Por una parte, en la calle de Jovellanos, hay una tapa de alcantarilla en la calzada hundida y sólo está parcialmente tapada por el asfalto, de manera que los coches tienen que reducir la velocidad al pasar por encima para evitar perder el control. De la otra, una tapa metálica en el edificio de Telefónica hace meses que está abierta y rota y nadie ha venido a arreglarla».