Territorio
Querría hacernos una pregunta: ¿quién no conoce a Jordi Just?
El expresidente de la Cámara de Comercio pronuncia una conferencia en el Círcol donde defiende que la gente empieza a «creer» en el territorio
En las instalaciones del Círcol, ayer se podía jugar a un singular Quién es quién de las personalidades del territorio. «Hacía tiempo que no veíamos una sala con tantas autoridades», reconocía, admirada, a Patrícia Terradellas, presidenta de la institución. Más de un centenar de personas –encontrar una silla vacía se convertía en una partida mobiliaria del clásico ¿Dónde está Wally? – se aglutinaron para mantener el silencio durante 91 minutos; para escuchar, risa, aplaudir y aprender. Delante suyo, un hombre que todo parece apuntar que será presidente de forma vitalicia. Jordi Just dejó su cargo al frente de la Cámara de Comercio hace cerca de un mes, pero todavía ejerce cátedra.
Antes de que pudiera pronunciar ninguna palabra, sin embargo, el micrófono lo cogió Josep Baiges. Es el actual concejal en cabeza del área de Promoción Económica, Innovación y Conocimiento del Ayuntamiento de Reus y, hasta hace no mucho, era el hombre de confianza de Justen el seno de la corporación. Ayer por la noche, era el encargado de presentarlo. «Querría empezar mi intervención haciéndonos una pregunta: ¿quién no conoce Jordi Just»?, arrancó. «Para conocer a Jordi Just de verdad, lo tienes que sufrir», continuó. Más de una sonrisa traviesa se dibujó en los rostros de las autoridades. Han sufrido el frenesí de Just, pero también han disfrutado.
El expresidente de la Cámara preparó no sólo un balance de su etapa al frente del organismo, sino que también analizara el territorio, punto por punto. «He creído en este territorio, tenemos un potencial muy importante, pero nos lo tenemos que creer», remarcaba. Deberes de futuro. No hay que crear demasiadas esperanzas ni ilusiones que entorpezcan el trabajo. No obstante, antes de su intervención, en declaraciones a los medios de comunicación, reconoció que el hito que más se lo enorgullece de esta parte de su vida ha sido «que la gente cree en el territorio» y que empezamos a despertarnos. Reclamó que se siga luchando por mejorar la red de infraestructuras –«sí alguien pensaba que no hablaría...», dejó caer–, sea por tierra, mar o aire. Recordó que la primera estación de Reus coincidió con el periodo de nacimiento de la Cámara. «Nacieron juntos como motores de proyección económica», expresó. Exigió que el área metropolitana del Campde Tarragona no sea un asunto exclusivo de los representantes políticos; y que no olvide los pueblos que no son capital de comarca. Sacó pecho de la solvencia económica del ente. Y concluyó con uno sonoro y especial: «Adelante las hachas»!.