Avalancha de alegaciones en Reus contra las nuevas ordenanzas fiscales: un total de 58

Los expedientes de modificación de las ordenanzas fiscales aprobados inicialmente para el ejercicio del 2024 han recibido un total de 58 alegaciones. El Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) y las tasas de recogida de basura, de terrazas y de vados han sido los tributos que más oposición han encontrado, así como la decisión de suprimir la bonificación del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica para los vehículos históricos.

El gobierno desestimará la mayoría de las enmiendas, pero ha aceptado atender la petición para mantener la exención del pago del impuesto de circulación de los automóviles considerados clásicos, tal como avanzó Diari Més en la edición del 19 de diciembre. El concejal jefe del área de Servicios Generales, Hacienda y Buen Gobierno, Manel Muñoz, explicó ayer que el colectivo de coches históricos «nos hizo ver que era posible distinguir entre un vehículo viejo y uno clásico».

En concreto, se mantendrá la bonificación para los medios de transporte que tengan una antigüedad mínima de 30 años, siempre que su titular disponga de otro vehículo en el que circule habitualmente. «Introducimos elementos para distinguir a las personas que tienen y hacen uso de un vehículo viejo de aquellas que tienen y coleccionan, sin hacer uso, un vehículo clásico», detalló. En paralelo, el edil presentó una autoenmienda al presupuesto «cuando empezamos a ver que atenderíamos la petición», ya que la modificación descuadraría la previsión de ingresos.

Algunos colectivos solicitaron que el incremento de los impuestos se repartiera entre los años que conforman el mandato. Muñoz subrayó que esta propuesta era «imposible de atender» porque «no podemos compremeternos ahora en cuestiones fiscales del ejercicio 2025, 2026 o 2027 porque no sabemos qué contexto tendremos». Asimismo, expresó que «hemos venido a transformar la ciudad desde el primer día» y que «no queremos aplazar hasta el próximo año lo que tenemos previsto hacer».

El sector de la restauración y la hostelería fue uno de los más vocales al expresar su rechazo a las nuevas ordenanzas fiscales, alegando que ya sufrió mucho durante la pandemia y que será especialmente castigado con la subida de tasas como la de terrazas. En este escenario, el edil de Hacienda apuntó que la ciudadanía se está fijando en el porcentaje de la subida (40% en el caso del uso de la vía pública), pero que, en términos absolutos, el impacto no será tan grande.

Asimismo, señaló que se están estudiando «fórmulas de encaje», como podría ser trabajar para que haya una reinversión de los mayores ingresos en el sector. «Como pasa también con los promotores y constructores, si la ciudad se beneficia de este sistema fiscal, si iniciamos un proceso de transformación y Reus gana, ellos ganarán también», concluyó. Adicionalmente, Muñoz recordó que la subida de la tasa de la basura responde a una «necesidad legal» para evitar que el servicio sea deficitario y lamentó que algunas alegaciones «tienen carácter político de oposición generalizada en la política fiscal».