Seguridad vial
La velocidad media en la avenida de l'Onze de Setembre de Reus supera el límite
La Guardia Urbana comprará catorce radares pedagógicos más para controlar el tráfico
La Guardia Urbana dispone, en estos momentos, de seis radares pedagógicos para su estrategia de seguridad vial y de pacificación del tráfico. Los aparatos informan a los conductores de la velocidad a la que están circulando y alertan si supera los límites establecidos. Además, permiten llevar a cabo estudios y derivar sus resultados en campañas y planes de acción específicos para la reducción de accidentes.
La avenida de l'Onze de Setembre ha sido uno de los escenarios donde se han examinado las dinámicas de circulación y la conclusión ha sido clara: la mayoría de los conductores supera la velocidad máxima permitida, según los datos registrados entre el 1 de septiembre y el 30 de noviembre del 2023, en que se han contabilizado casi 1.200.000 vehículos.
La avenida tiene un radar pedagógico instalado en cada sentido de la circulación. En sentido en la calle del General Moragues, la velocidad media de los vehículos fue de 38,35 kilómetros por hora (km/h). Hacia la zona de Pompeu Fabra, llegaba a los 40,13 km/h. Hay que recordar que la velocidad máxima está fijada en 30 km/h y que la vía está catalogada como preferente para ciclistas. De hecho, según datos facilitados por el Ayuntamiento de Reus, sólo un 24,64% de los conductores circulaban a menos de 30 km/h para llegar a General Moragues y un 27,92%, a Pompeu Fabra.
Fuentes municipales señalan que datos parecidos se han podido extraer de otros puntos de la ciudad donde la Guardia Urbana ha colocado radares pedagógicos, como las avenidas de Salou, de Jaume I y de Tarragona; las calles del Pintor Fuster y del General Moragues; los arrabales de Robuster y de Sant Pere o la riera Miró.
La concejala de Seguridad Ciudadana y Convivencia, Dolors Vázquez, valora que «estos radares complementan la estrategia de la Guardia Urbana hacia una movilidad sostenible y segura, y corrigen el comportamiento de los conductores, pero al mismo tiempo registran datos del tráfico que nos permiten realizar estudios para diseñar campañas más contundentes con las correspondientes denuncias».
Nuevos equipos
Constatada la efectividad de los equipos, que propician que los conductores levanten el pie del acelerador, tanto por parte de los cuerpos de seguridad como de los vecinos, el Ayuntamiento ha decidido adquirir 14 nuevos radares pedagógicos de control de la velocidad del tráfico, tal como avanzó Diari Més en la edición del 2 de enero. El presupuesto base de la licitación es de 33.560,85 euros (IVA incluido) y las unidades se entregarán de forma gradual durante los próximos cuatro años.
La función principal de los radares es de carácter pedagógico: informan a los conductores del exceso de velocidad a la que circulan y los avisan, si es el caso, de que están cometiendo una infracción. Como mínimo, los nuevos equipos registrarán la cantidad de vehículos que circulen por la calzada en la que se instalen y las velocidades medias y máximas en los dos sentidos de la circulación. En general, se colocan en vías en las que se considera que se tiene que tener un control especial, por ejemplo, por la proximidad de escuelas.