Salud
Reus empieza a construir una red de activos dedicada al bienestar emocional y mental
Se ha contactado con una cincuentena de servicios, municipales y externos, y ahora se quiere tratar con agentes asistenciales
El Ayuntamiento de Reus puso en marcha en noviembre el nuevo Servicio de Atención y Orientación al Bienestar Emocional y Mental. Tres meses más tarde, se ha constituido un grupo motor, formado por diferentes departamentos, y se ha generado una red con una cincuentena de activos —47, a 19 de febrero— del territorio, tanto servicios municipales como entidades externas, para «poder dar respuesta a las necesidades de la población», explica el concejal de Salud, Enrique Martín.
El siguiente paso será ir «más allá». Martín detalla que ya se están manteniendo conversaciones con agentes asistenciales, como los referentes en bienestar emocional y comunitario (RBEC), las Áreas Básicas de Salud (ABS) y los Centros de Atención Primaria (CAP), para «acabar de coser todas estas sinergias».
El consistorio habilitó un número de teléfono (977 010 679) y un correo electrónico (soa.emocional@reus.cat) para que quien sienta malestar emocional pueda ponerse en contacto con una psicóloga que le escuchará y le orientará al recurso pertinente. Con todo, el edil destaca que eso es «la punta del iceberg», una «puerta de entrada».
«El proyecto no va de ser una atención telefónica, sino que es una manera de facilitar la vida a la gente para que pueda acceder a todos los servicios que hay detrás», expresa. Cuando una persona llama y verbaliza su malestar, primeramente se le escucha y se le calma. Según sus necesidades y su perfil, se le orienta hacia un servicio determinado.
Entonces, el Ayuntamiento no se desentiende, sino que activa la fase de atención: hace un seguimiento de cada caso en el que, por término medio, hay unos 50 input con los activos, para saber si el ciudadano ha asistido a la opción planteada o no y qué respuesta está teniendo. En este proceso, el edil remarca que se mantiene la confidencialidad del usuario. También pueden contactar el entorno de la persona afectada o los profesionales que traten.
Martín recuerda que las competencias del consistorio en salud mental son «limitadas», pero, sin embargo, «no podemos estar mirando hacia otro lado» ante un problema «como sociedad que con la pandemia todavía se ha visto de forma más clara y que tenemos que abordar». «No podemos dejar pasar el tiempo», asevera.
Próximamente, la concejalía de Salud sacará una campaña para dar a conocer el servicio y ofrecerá talleres psicoeducativos para dar visibilidad y sensibilizar sobre el bienestar emocional. «Aspiramos a ser un referente», expresa Martín, quien remarca que «no es un servicio que se acabará valorando cuantitativamente». «No se trata de si atendemos a 2.000, 200 o 50 personas; si somos capaces de ayudar a una serie de gente a que no llegue a situaciones extremas, el objetivo estará más que alcanzado», concluye.