Una pelota y una pala como terapia
El CTT Ganxets celebra un torneo de tenis mesa para personas con Parkinson que supera todas las expectativas
Palas golpeando pelotas; pelotas golpeando palas; las esferas que botaban, caían, rebotaban y tintineaban; y un juez que sumaba un punto al marcador. Sonaba como una jornada cualquiera en las instalaciones del Club Tennis Taula (CTT) Ganxets, pero era una de bien especial: era el primer torneo para personas con Parkinson. «Se ha convertido en uno de los torneos más potentes que haremos durante la Semana del Tenis Mesa», expresaba el presidente de la entidad, Joan Carles Virgili. Una cuarentena de participantes de toda Cataluña cogieron ayer la pala para ir a Reus. Se habían «desbordado» las expectativas, asegura el presidente.
El CTT Ganxets ya ofrecía clases para pacientes con esta enfermedad. Un par de jugadores mostraron interés en inscribirse al Campeonato de España de Parkinson de Tenis Mesa, que tendrá lugar en abril. «¿Por qué no aprovechamos para hacer una competición antes?», se preguntó Virgili. Ya había constatado que el deporte es «la mejor terapia»: es una herramienta de socialización que, además, ayuda a mejorar la coordinación, los movimientos de las articulaciones, los temblores y el equilibrio. Los jugadores «no pierden la sonrisa», asegura.
El neurólogo Jordi Casanova, del Hospital Universitario Sant Joan, lo valida: «El ejercicio físico de forma regular es beneficioso en estos pacientes». El Parkinson afecta a la postura corporal y la estabilidad. Son alteraciones que «responden muy poco a la medicación disponible». «Todo el que sea fisioterapia o rehabilitación, reforzar y activar la musculatura, es fundamental y muy beneficioso», asegura. Uno de los síntomas más asociados a la enfermedad es el temblor. Casanova explica que hay pacientes que al escribir, o al decorar miniaturas, dejan de notarla. «Cuando ponemos en marcha un patrón motor voluntario, una actividad que queremos hacer, el temblor mejora», explica. Cuando el jugador coge la raqueta y está concentrado con impactar la pelota, también mejora. «El ping-pong, al ser una actividad voluntaria durante un rato largo, hace reducir el temblor que tienen en las manos, y a eso le sumamos el beneficio de la estabilidad a la postura», afirma. «La actividad física y el tenis mesa son beneficiosos para las personas con Parkinson», añade.
Más allá del bienestar físico, Virgili destaca que el tenis mesa permite a los jugadores «socializar» y que, con este torneo, no se buscaba «ganar o perder», sino «divertir y salir un poquito del día a día». Antes de que se cogieran las primeras raquetas, el presidente del CTT Ganxets ya soñaba que la debutante competición para personas con Parkinson fuera sólo una puerta de entrada. «Me gustaría que fuera el principio, que se convirtiera en un hito habitual», reconocía. Habrá que analizar cómo ha ido la edición inaugural, pero el torneo ha presentado candidatura para incorporarse al calendario anual del club.