Sucesos
Los Mossos retiran un artefacto explosivo encontrado en la calle del Alcalde Joan Bertran de Reus
Podría tratarse de un vestigio de la Guerra Civil
Agentes de los TEDAX de los Mossos d'Esquadra retiraron ayer por la mañana un artefacto explosivo descubierto a pies de un platanero en la calle del Alcalde Joan Bertran. El hallazgo obligó a cortar la circulación y el paso de peatones en esta vía, así como en la limítrofe calle de Xavier Gambús y en el parque de la plaza de Antoni Pedrol Rius, durante más de una hora. Fuentes policiales apuntan que se trataría de un explosivo de la Guerra Civil que podría haber emergido a la superficie después de las lluvias o por el crecimiento de las raíces del árbol. Fuentes de Mossos apuntan que «no es inusual» que todavía se encuentren vestigios del conflicto bélico.
Los cuerpos policiales recibieron el aviso hacia las 9.40 horas de la mañana y, acto seguido, la Guardia Urbana bloqueó el acceso a las calles del Alcalde Joan Bertran y de Xavier Gambús, así como al parque de la plaza de Antoni Pedrol Rius, para proteger el perímetro hasta que llegaran los Mossos d'Esquadra. Las personas que querían atravesar el espacio acordonado para ir hacia el paseo de Prim eran desviadas hacia la calle de Antoni de Bofarull. Los técnicos especialistas en desactivación de artefactos explosivos procedieron a retirar el hallazgo tocadas las 11 h. para llevarla a una «zona de seguridad», especifican fuentes de Mossos, y, a continuación, revisaron todas las papeleras de los alrededores por si se encontrara un segundo dispositivo. Hacia las 11.10 h., se desprecintó el entorno y se volvió a permitir el paso a vehículos y peatones. Con todo, los agentes pedían a la ciudadanía que cruzara de acera y no pasara por delante de la batería de contenedores del cruce entre las calles Joan Bertran y Gambús, a falta de inspeccionar su interior, si bien comentaron que no había indicios de encontrar «nada más». Pasaban cinco minutos de las 12 del mediodía cuando todos los cuerpos policiales se retiraron del lugar al verificar que ya no había peligro.
La situación generó minutos de rumores y temor entre los vecinos de la zona. Decenas de cabezas emergieron de las ventanas y balcones que rodean el parque de la plaza de Antoni Pedrol Rius preguntándose por qué se había colocado la cinta de seguridad y vehículos de la Urbana impedían el paso a turismos, con los pájaros o el sonido puntual de un walkie-talkie como únicos ruidos. Los pocos locales abiertos en la calle del Alcalde Joan Bertran optaron por cerrar temporalmente las persianas por precaución.