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Sandra Guaita: «Hemos trabajado para la ciudad y nos era igual a quién teníamos que reclamar»

La alcaldesa de Reus completa el primer año de mandato y explica que se han tenido que tomar decisiones como subir impuestos para «dar respuesta» a necesidades urgentes y que hay «demasiado» trabajo como para «perder el tiempo» en partidismos

L’alcaldessa de Reus, Sandra Guaita, destaca que no volia que la ciutat quedés «estancada».

La alcaldesa de Reus, Sandra Guaita, destaca que no quería que la ciudad quedara «estancada».Adrian Disch

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¿Después de este primer año, como ve la ciudad??

«Tenemos la suerte de tener una ciudad superdinámica donde las entidades y los empresarios se han puesto a disposición desde el primer momento. La ciudad va avanzando, pero tenemos margen de mejora, y con esta voluntad seguimos mejorando».

¿Cómo está siendo la relación con los socios de gobierno?

«Agradezco el trabajo de los 14 concejales que se han puesto las pilas desde el primer momento, que han empezado a remar para que eso funcione y para que el cambio se note, y creo que es una evidencia que se ha notado ya en este primer año».

¿Está siendo un equipo de gobierno o tres partidos que gobiernan?

«Está siendo un equipo de gobierno. Tenemos claro que todos vamos hacia la misma dirección porque la voluntad es remar por aquello que nos une, para la construcción de la ciudad».

ERC criticó que «la manera de hacer socialista» lleva «al estancamiento».

«No entraré en posicionamientos de este tipo. He venido a trabajar. Soy la alcaldesa, tenemos 14 concejales que están trabajando para esta ciudad y creo que hay demasiado trabajo para perder el tiempo en otras cosas».

Se subieron los impuestos. ¿Se está viendo reflejado en mejoras en la ciudad?

«Es evidente que las ampliaciones de los contratos de limpieza, los planes directores de la vía pública, los planes de choque de pintura en las escuelas y mantenimiento de los equipamientos deportivos, todo eso tiene un impacto en la ciudadanía y es lo que veníamos a hacer. Se ha visto abocado en los recursos públicos que tenemos. Queremos tener la ciudad que la ciudadanía merece, para tener un Reus 10, que no es un eslogan, sino una realidad».

¿Se podría haber evitado o mitigado la subida?

«Hicimos lo que considerábamos que se tenía que hacer para dar una respuesta necesaria. Lo que no podíamos era quedarnos estancados. Queríamos transformar la ciudad y sacarla adelante. Y algunas subidas eran por imperativo legal: la tasa de la basura viene marcada por ley, tiene que cubrir todo el servicio, no podemos tener déficit».

Uno de los primeros anuncios fue que el Mercado del Carrilet se quedará en el emplazamiento actual. ¿En qué punto nos encontramos?

«En julio se presentará el anteproyecto y tiene que pasar por el pleno. Después pasaremos los proyectos básicos y ejecutivos. Vamos sobre los timings marcados. Los primeros pasos eran permitir que los paradistas se queden en el mercado hasta que se inicien las obras y se ha trasladado que será así».

¿Será sólo para usos de mercado?

«No, será un espacio polifuncional y tendrá el mercado, pero también equipamiento».

¿Qué equipamiento?

«Tenemos una idea inicial, pero se tiene que acabar de definir. El anteproyecto se ha trabajado contemplando varios usos».

También se transformará el entorno del mercado. Se había hablado de hacer viviendas.

Hacer viviendas es una acción que podría estar contemplada. Lo que haremos en toda el área es lo que se acaba de definir: remodelación de la calle Escultor Rocamora, los alrededores del edificio del mercado y qué acabaremos haciendo con la estación de autobuses».

¿Para el inicio de obras, cuánto tiempo tocará esperar?

«Un par de años».

¿Una vez empiecen, qué pasará con los paradistas?

«Estamos trabajando, también, con la posible ubicación de los paradistas».

¿Se podrían mover al Mercado Central?

«Se están trabajando diferentes opciones. No hay nada cerrado. Está la opción que se queden en el mismo barrio...».

¿Tienen decidido qué se hará con la nave adquirida en la avenida del Carrilet?

«No. Hemos hecho una propuesta de posibles usos de la nave, pero queremos mirar si es válida técnicamente».

En campaña, propusieron que se trasladara la Casa de la Fiesta.

«Es una de las opciones, no la única. Estamos intentando saber qué tipo de equipamiento municipal se puede ubicar».

Con la Generalitat, estaba previsto que este año se trabajara con el pabellón del Molinet.

«El pabellón del Molinet es una de las acciones que habíamos presupuestado para el 2024. Han caído los presupuestos de la Generalitat. Está a la espera de la financiación que tendría que venir. Trabajamos para que en el momento que el Govern catalán tenga presupuesto, lo tengamos listo».

¿Confía en la utilidad del TramCamp?

«Totalmente. Pensamos que tiene que ser una pieza fundamental del área metropolitana y para nuestra movilidad interna. Hay un trazado que nos permite enlazar con el resto de municipios y con el aeropuerto. Creemos que es un proyecto imprescindible. Son 500 millones de euros que vienen de fondo Next Generation y que no nos podemos permitir el lujo de perder».

¿Sin Salou podría salir adelante?

«Lo que creemos que tiene sentido es área metropolitana, que todos los municipios trabajamos conjuntamente en este proyecto. A mí me consta que todo el mundo quiere el proyecto, con matices dentro de sus municipios. Desde Reus y Tarragona hemos dicho que queremos que la fase 1 salga adelante y que la fase 2, también. Si no hace falta que sean consecutivas, si pueden ser en paralelo, que sea así».

Parecía haber consenso con la cesión de la playa de vías. ¿Cómo está el tema??

«Nos reunimos con Adif y se está trabajando técnicamente la posible cesión de las vías».

¿Tienen una idea de qué querrían hacer?

«Hay muchos proyectos sobre la mesa: que sea una zona verde, construcción de pisos... Se tiene que analizar cuál es la cesión, cuáles son las condiciones y qué nos permite hacer en aquel espacio. En este momento, la playa de vías se está utilizando. Una vez sepamos qué nos ceden, sabremos qué usos le queremos dar».

A finales de año estará todo listo para la puesta en marcha de la Zona de Bajas Emisiones. Estaban trabajando en nuevos aparcamientos disuasivos. ¿Dónde se harán??

«Se están trabajando diferentes ubicaciones; algunas están más avanzadas y otras todavía estamos buscando el emplazamiento, porque a veces son privados. Pero queremos que estén en el norte, el sur, el este y el oeste y que haya intermodalidad, que puedas dejar el vehículo privado y que al lado tengas un elemento de transporte público accesible, como el autobús, la Ganxeta o caminando».

El aparcamiento del Pi del Burgar no continuará allí.

«Se está trabajando un emplazamiento muy cerca del Pi del Burgar para que haya un nuevo aparcamiento disuasivo allí».

Los últimos años se está viendo cómo la tecnología se adentra en las nuevas políticas, con aplicaciones móviles como Aparcar, la de seguridad ciudadana, la de la Ganxeta... ¿Se esperan más apps en un futuro?

«No sé si más aplicaciones o la integración de estas para que den más servicio. Tenemos claro que la tecnología tiene que venir para ayudar a la ciudadanía».

¿Se está trabajando en la app para los desperfectos en la vía pública?

«La app de seguridad probablemente puede contemplar otras cosas y una podría ser vía pública. El software puede tener más funcionalidades. Hay consenso entre los municipios con la seguridad, pero quizás nosotros cogemos un paquete con otras funcionalidades».

¿La brigada de intervención rápida, en qué punto está?

«Estamos trabajando. Lo que sí que hemos hecho es, para dar una respuesta más rápida al equipo de Brigades, dotarlo de más personal. Se ha incorporado gente y, en unos meses, se incorporan seis personas, para dar una respuesta más rápida a una demanda histórica».

Los últimos meses han estallado varios conflictos sociales: La Vitxeta, ICASS, trabajadores de Reus Net... ¿El Ayuntamiento podría haber hecho más para evitarlo?

El Ayuntamiento ha hecho muchísimo para evitarlo. No habría sido manera de actuar salir despotricando. Hemos trabajado con todas las administraciones públicas y hemos puesto el foco única y exclusivamente en los ciudadanos, los niños, las personas mayores. Hemos trabajado para la ciudad y nos era igual a quién teníamos que reclamar y lo hemos reclamado como nadie se puede llegar a imaginar».

Antes de convertirse en alcaldesa, decía que quería recuperar la capitalidad de Reus. ¿Con el área metropolitana, cómo queda eso?

«Queda exactamente igual. Nosotros tenemos dentro del área metropolitana ciudades referentes en diferentes aspectos y el área metropolitana no viene a anular las particularidades de cada una, sino que viene a sumarlas. Seguiremos trabajando para ser un polo de atracción, no como un egoísmo de ciudad, sino como una generosidad hacia el área metropolitana. ¿Como territorio, qué ofrecemos? Ofrecemos Tarragona romana, Cambrils pescadora, Salou turística, Reus modernista...».

El lunes comentó que se está trabajando en desplazar la estación de autobuses.

«Sí. Cuando vino la consellera hace unos meses a la ciudad, hablamos de la necesidad de que a la estación de autobuses se le dé por completo una vuelta. Tenemos una estación que nos parece que no es digna de nuestra ciudad en su estado actual. Es la entrada en Reus para mucha gente. Se trabajaron diferentes opciones. Una de las propuestas era que tenía que ir compasada con la transformación del barrio, porque no tendría mucho sentido que el Ayuntamiento vierta recursos y se quedara la estación como está. La otra opción era ver si podemos desplazar la estación. Con eso se está trabajando técnicamente. Se ha trabajado con la posibilidad de que se desplace y se libere el espacio actual, para una zona verde, y se está buscando la ubicación exacta para que nos permita hacer intermodalidad en otros transportes, como el apeadero de Bellissens, la Ganxeta y el autobús urbano».

¿Se ha descartado reformar el equipamiento?

«No se ha descartado nada de momento. Nosotros pensamos que la mejor opción es trasladar el equipamiento».

¿Saben plazos?

«No. Hay cuatro fases en el desarrollo del Carrilet. La primera es el edificio del mercado y las zonas de los alrededores. La estación de autobuses es otra fase, que no quiere decir que tenga que ir más tarde, sino que no obligamos las dos a ir conjuntamente porque dependemos de otra administración. Hemos trasladado a la Generalitat que se tiene que hacer en paralelo con la remodelación urbanística. En 2026 se empieza con el mercado y la zona de los alrededores. Estaría muy bien que en 2026 o en 2027 también la estación de autobuses se repiense con la nueva ubicación».

¿El hecho de que no haya presupuestos ni de la Generalitat ni del Estado, ha dificultado hacer políticas?

«Lo dificulta mucho. Necesitamos que haya gobiernos en las dos administraciones y que haya presupuestos. Los municipios necesitamos que haya estabilidad porque las elecciones son cada cuatro años a toda costa y las ciudades tienen que ir rodando. La estación intermodal, el tranvía, una pieza fundamental de nuestro desarrollo urbanístico, y la estación de autobuses dependen del hecho de que haya gobierno».

Necesidades urgentes y mirada larga

Sandra Guaita cogió la vara de alcaldesa de Reus hace justo 1 año y 2 días. Doce meses más tarde, explica que se ha centrado el trabajo en «atender necesidades urgentes», pero también recuperando la «mirada larga» y pensando «a lo grande». «Vengo a trabajar para la ciudad y los reusenses y es la idea con que me levanto cada día», reconoce.

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