Personas mayores
Dieciséis plazas de las residencias de la Mercè y Horts de Miró, bloqueadas por el ICASS
Derechos Sociales preveía que la residencia ICASS estuviera vacía al finalizar el mes de junio, hecho que no ha sido así
El departamento de Derechos Sociales sigue negociando con los ocho residentes que todavía se resisten a abandonar las instalaciones del ICASS. Estaba previsto que para el pasado 30 de junio todos los usuarios hubieran sido trasladados y el equipamiento hubiera quedado vacío. Por este motivo, desde el departamento habían reservado plazas en las residencias de la Mercè de Tarragona y Horts de Miró de Reus, con la voluntad de ofrecer alternativas temporales a las familias.
Según han explicado fondos del departamento de Derechos Sociales al Diari Més, estas reservas se mantienen a estas alturas con sus consecuencias: «Hay ocho plazas bloqueadas en la residencia Horts de Miró y ocho en Mercè, a la espera de que estas familias decidan dónde se quieren trasladar. En consecuencia, hay dieciséis personas en lista de espera que continúan en su casa, sin poder acceder todavía a uno de los dos centros».
Desde la Generalitat recuerdan que la estructura de la residencia «está afectada de múltiples patologías constructivas y problemas funcionales graves» y que «hay que iniciar las obras de rehabilitación cuanto antes mejor». Además, consideran que «la intervención en el edificio será de una gran magnitud y hará técnicamente incompatible la prestación del servicio asistencial a personas mayores con un alta dependencia y vulnerabilidad, si queremos garantizar su integridad y bienestar».
Catering hasta el 10 de julio
Por otra parte, actualmente el departamento ha garantizado la alimentación de los 8 residentes contratando un catering externo a una empresa especializada, la cual presta servicio en la residencia de Montblanc. «Por la tipología del contrato que se nos permitía hacer con las condiciones en las que nos encontramos, el servicio está garantizado hasta el 10 de julio y los familiares de los residentes son conscientes», afirman desde el departamento.
Desde la Generalitat se han visto obligados a tomar esta medida porque el pasado 30 de junio fue el último día del personal de cocina. Este lo proveía la empresa Serunion, que se encontraba con una prórroga del contrato. Los trabajadores del servicio de cocina criticaron que el departamento no buscara ninguna solución para su situación personal, ya que, actualmente los nueve empleados se encuentran en un permiso retribuido de quince días mientras la empresa les busca alguna alternativa en otros centros que ofrecen el servicio.
En caso de no encontrarla, estos serán despedidos con la correspondiente indemnización al finalizar el permiso. Ante este hecho, desde el departamento defienden que «hemos hecho esfuerzos, pensando en los y las trabajadoras, para reubicarlos en Tarragona o en otro recurso, pero no ha sido posible».
Pacto de confidencialidad
A la vez, las negociaciones continúan entre los mediadores y las familias para encontrar una solución al actual conflicto. Según informó recientemente Canal Reus, los mediadores y familias firmaron un pacto de confidencialidad entre ambas partes hasta que se aclare la situación. El representante de las familias del ICASS, Tarsicio Ros, aseguraba en micrófonos de la televisión reusense que estaban abiertos a llegar a cualquier acuerdo mientras este fuera «satisfactorio».