Salud
El Hospital Universitari Sant Joan de Reus registra 176 primeras visitas en un año de gente que quiere dejar el tabaco
En la primera visita se evalúan los condicionales de la vida del paciente y para recibir el alta tienen que estar seis meses sin fumar
La Unidad de Tabaquismo del Hospital Universitari Sant Joan registró 176 primeras visitas entre junio del 2023 y junio del 2024. Son 176 personas que están decididas a dejar de fumar o, como mínimo, a reducir el consumo, pero lo cual necesitan una mano para conseguir su objetivo.
Meritxell Cortasa, enfermera de la Unidad de Tabaquismo, explica que, durante la primera visita, «la más extensa», se evalúan los condicionales de la vida del paciente y se elabora un plan individualizado que irá acompañado de un seguimiento de seis meses o más.
«Si a una persona se le da una medicación y no se hace nada más, la eficacia no es tan superior como si hay un seguimiento detrás», subraya la médico adjunta del Servicio de Neumología, a Lourdes Rofes, que añade que la importancia de la entrevista inicial recae en el hecho de que, detrás de una adicción, «a veces hay otras circunstancias que dificultan que aquella persona deje de fumar».
La mayoría de los usuarios de la unidad llegan derivados de otros servicios del hospital, como podría ser el programa de rehabilitación cardiaca o los pacientes que se tienen que intervenir de una neoplasia de colon, o de los centros de atención primaria.
«Son gente que venden al hospital por otro motivo de consulta y, entonces, la persona que lo visita, detecta que es un paciente fumador que quiere dejar de fumar y también nos lo deriva», detalla Rofes. El grueso de la población que atiende el servicio se encuentra en una franja de edad entre los 40 y los 60 años.
Para recibir el alta, el paciente tiene que estar seis meses sin fumar «porque los estudios dicen que, a partir de los seis meses, las recaídas son mucho menos frecuentes», apunta a Rofes. Si en el transcurso del semestre vuelve a fumar, la cuenta vuelve a la casilla de salida. «Es desde el primer día que ha dejado de fumar y no ha recaído nada, porque si va haciendo alguna recaída y damos el alta a los seis meses, a veces vuelven a recaer», remarca a la médico adjunta del Servicio de Neumología.
Para asegurar la abstinencia, antes de iniciar el tratamiento farmacológico, se requiere una preparación, «que esté convencido de dejar de fumar», «que también vea los motivos que tiene para dejar de fumar», señalan a Cortasa y Rofes. «Los fármacos ayudan mucho, pero tiene que haber la voluntad y las ganas de no fumar; hay una parte que depende del paciente», cierran.
A escala del conjunto del Estado, se calcula que entre un 30 y un 40% de las personas que piden ayuda para dejar de fumar consiguen su objetivo. En el porcentaje restante se incluye la gente que no se planteaba dejar de fumar del todo, sino hacerlo menos.
Acreditados con la máxima distinción
Te puede interesar:
Camp de Tarragona
Un estudio sobre tabaquismo del ICS Camp de Tarragona, premiado por una revista europea
Redacció