Policial
La mossa d'esquadra de Reus que salvó la vida a un joven que se ahogaba en un lago de los Pirineos
Andrea, que está de prácticas en Cambrils, asegura que no dudó ni un segundo en socorrer al chico y reanimarlo
Los agentes policiales están preparados para actuar con rapidez en momentos críticos, incluso los días que no visten su uniforme. Así lo demostró una aspirante a mossa d'esquadra que, mientras estaba fuera de servicio, salvó la vida a un joven francés de 17 años que se estaba ahogando en un lago de los Pirineos. Andrea, que está de prácticas en la comisaría de Cambrils, asegura que no dudó ni un segundo en socorrer al chico y lo reanimó.
Los hechos sucedieron a principis de agosto en los lagos de Ayous, situados en el Parque Nacional de los Pirineos cerca del Pico de Midi de Ossau. Algunos medios franceses que se hicieron eco explicaban que un joven entró en el agua para refrescarse, pero perdió el equilibrio y cayó. Sus amigos tuvieron que rescatarlo y llevarlo a la orilla, porque no sabía nadar y se ahogó.
Aquel día, Andrea estaba de excursión por la zona con su pareja. «Paramos en un refugio a comer y estábamos distraídos con los caballos que había allí. De repente, escuchamos cómo un grupo de jóvenes empezaban a gritar y vimos cómo dos corrían hacia el lago para sacar a un chico inconsciente», comenta. La aspirante a agente de la policía catalana reaccionó rápidamente y, deprisa, se acercó a la persona ahogada: «Le tiré la cabeza hacia atrás, le abrí las vías respiratorias y empecé la reanimación cardiopulmonar (RCP)».
En aquel momento, recordó lo que aprendió sobre primeros auxilios el año pasando cuando hizo el curso de formación básica para policías. «Como tenía la información tan reciente, tenía muy claro lo que tenía que hacer», asegura la protagonista de esta heroica acción, quien se dio cuenta de la importancia de tener estos conocimientos. No sólo para ella, sino para cualquier persona. Poco después de empezar las maniobras de reanimación, se acercó otro hombre para ofrecer su ayuda.
Así pues, Andrea y él se fueron alternando hasta que el joven ahogado expulsó agua por la boca. Lo colocaron en posición lateral de seguridad, lo taparon con una toalla y le hicieron compañía hasta que llegó el helicóptero que lo trasladó al hospital para examinarlo. Desde entonces, Andrea no ha vuelto a tener contacto con él: «Cuando acabó todo, los servicios médicos me dijeron que estaba todo bien y que había hecho un buen trabajo».
Una vocación clara
Estaba satisfecha por lo que había hecho, pero le quitó importancia porque pensaba que «es lo que tocaba hacer». Sin embargo, reconoce que es «muy bonito» salvarle la vida a una persona. «He podido hacer eso gracias a mis decisiones, como la de decantarme por este trabajo», afirma Andrea. Nacida en Reus, se mudó a Tarragona hace años. Siempre ha tenido vocación de ayudar a las personas, tanto cuando era monitora de kárate como cuando ayudaba a una chica con Asperger con sus estudios y los problemas del día a día.
Desde el instituto, tenía claro que quería entrar a los Mossos d'Esquadra, pero decidió hacer primero una carrera. «Después del doble grado en Administración y Dirección de Empresas y Derecho, tuve más claro que nunca que quería ser mossa y me presenté a las oposiciones», explica. Ahora, con 26 años, está acabando las prácticas en Cambrils, donde su actuación de mérito será merecidamente reconocida.