Junts trasladará al Parlament el rechazo a la ubicación de la estación bus en el Parque Mas Iglesias

El grupo parlamentario de Junts defenderá en el Parlament de Catalunya el rechazo a la ubicación de la nueva estación de autobuses en el Parque Mas Iglesias. Así lo ha anunciado la portavoz del grupo parlamentario, Mònica Sales, en una reunión que ha mantenido en Reus con representantes de la Plataforma en Defensa del Parque Mas Iglesias, junto con el diputado y presidente de la veguería del Camp de Tarragona, Quim Calatayud, la diputada reusense Noemí Nieto, la concejala y portavoz adjunta, Mariluz Caballero y la presidenta de la ejecutiva local del partido, Anna Tarragó.

El encuentro se ha celebrado a petición del grupo municipal y de la ejecutiva local de Junts, que, a lo largo de las últimas semanas, ha hecho llegar al grupo parlamentario la preocupación que comparten con la Plataforma y con buena parte de los vecinos del barrio por el traslado de la estación de autobuses en el Parque Mas Iglesias.

Sales ha constatado que hay un clamor vecinal en contra del proyecto del Gobierno municipal y ha lamentado que, lejos de rectificar, a PSC, ERC y Ara Reus «quieren sacar adelante este traslado sin ningún tipo de miramiento, como se pudo comprobar hace una semana en el pleno del Ayuntamiento con su rechazo a la moción de Juntos por Reus, que pedía reconsiderar la ubicación de la nueva estación de autobuses».

Por eso, la portavoz ha afirmado que el grupo parlamentario de Junts «no nos quedaremos de brazos doblados y pediremos al Govern de la Generalitat que detenga la tramitación administrativa del proyecto, teniendo en cuenta que tiene la titularidad de esta infraestructura». «Velaremos para que el Govern de la Generalitat actúe con sentido común ante un gobierno municipal absolutamente cerrado en banda», ha señalado Sales después de la reunión.

Según su opinión, «cuando un proyecto genera más problemas que soluciones, queda claro que no es un buen proyecto» y ha enumerado los principales problemas asociados a la nueva ubicación: impacto negativo en la vida de los vecinos, afectación a uno de los pocos pulmones verdes de Reus y consecuencias graves en el tráfico, la contaminación acústica y atmosférica, y la seguridad vial. Ahora bien, «el problema de base es que el Gobierno municipal no ha escuchado a los vecinos», ha añadido.

Asimismo, ha recordado que ni PSC, ni ERC, ni Ara Reus incluyeron este proyecto a sus programas electorales, pero que tampoco abrieron un proceso de escucha activa con los vecinos y entidades afectadas, y que ahora no tienen ninguna intención de iniciar un proceso de diálogo y de consenso real con los actores afectados.

Finalmente, Junts ha reafirmado el compromiso de seguir liderando la oposición política al proyecto, tanto en el ámbito local como también desde el Parlament, y de mantenerse al lado de los vecinos de Mas Iglesias en la defensa de un espacio público esencial por la ciudad.