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El pleno del Ayuntamiento de Reus aprueba una subida de la tasa de la basura y el agua

El precio del billete sencillo de autobús costará finalmente 1,50 € a propuesta del PP

Imagen de archivo de contenedores llenos en Reus.

Contenedores de basura|maleza en Reus.Diario Más

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El pleno del Ayuntamiento de Reus ha aprobado una subida de la tasa de la basura y del agua gracias a los votos favorables del equipo de gobierno (PSC, ERC y Ara Reus). Mientras que Junts, Vox y CUP ha votado en contra, y el PP y el concejal no adscrito se han abstenido. El incremento de la basura corresponde a una adaptación a la normativa europea. Con respecto al recibo del agua, habrá una subida del 5% en la parte fija, y entre un 10 y un 30% a los que más consuman.

El pleno también ha dado luz verde al encarecimiento del precio de los abonos del transporte público un 5%, y del billete sencillo que de 1,30 € pasará a 1,5 €; 10 céntimos menos de lo que preveía el equipo de gobierno, gracias a una propuesta del PP validada también por PSC, ERC, Ara, Vox y CUP.

Este viernes por la mañana se ha celebrado el pleno ordinario del mes de octubre del Ayuntamiento de Reus con las ordenanzas fiscales como punto más destacado del orden del día. En cuanto a la basura, el recibo sufre un incremento del 1,85%. Y en el agua, el ejecutivo local sube un 5% el canon del agua y aumenta el tercero y cuarto tramo de la tarifa variable. El tercero, que afecta los usuarios que consumen entre 100 y 250 litros por persona y día, se subirá un 10%, mientras que el cuarto, que es de nueva creación, afectará los consumos de más de 250 litros por persona y día, aumentándose un 30%.

Congelación de impuestos y bonificaciones

El gobierno municipal ha congelado la mayoría de las tasas como por ejemplo el IBI, el ICIO y el impuesto a vehículos de tracción mecánica. También ha mantenido los precios de los aparcamientos municipales, la zona azul o el servicio de bicicleta compartida estrenado el año pasado. El consistorio sí que ha aprobado algunas modificaciones encarriladas a bonificar varias cuestiones relacionadas con el acceso a la vivienda o la transición energética.

El regidor de Servicios Generales y Hacienda del Ayuntamiento de Reus, Manel Muñoz, ha insistido que no pueden bajar los impuestos a causa de la situación de «necesidad de financiación» que dejó el anterior equipo de gobierno. También ha remarcado que la subida del recibo de la basura responde a una adaptación legal para cumplir la normativa europea. «Estamos trabajando para cumplir el objetivo de quien más recicle, menos pague», ha explicado también Muñoz.

La oposición critica algunas tasas

Desde Junts, Mariluz Caballero, ha lamentado que el gobierno no haya «escuchado» las propuestas que ha hecho la formación sobre las ordenanzas fiscales, y ha avisado que presentarán alegaciones. «No entendemos ni compartimos su visión económica», ha comentado. Junts ha pedido una rebaja de impuestos después de que el año pasado el gobierno municipal los aumentara.

El portavoz de Vox, Julio Pardo, ha criticado que los parkings comunitarios también paguen la tasa de la basura, puesto que los de extrema derecha apuntan que se produce una «doble recaudación» porque la pagará el propietario del piso y del aparcamiento, que a menudo acostumbra a ser el mismo. Pardo también ha señalado que el precio del agua es «mucho más caro» que poblaciones del alrededor.

El regidor del PP, Sebastià Domènech, ha señalado que el aumento del billete de buzo era «excesivo» y considera que es una «afectación mínima» a Reus Transport. Sobre la basura, ha reclamado estudiar instalar contenedores inteligentes con tarjeta. En lo referente al agua, el popular ha pedido que el aumento del precio se repercuta en mejoras en la red.

La portavoz de la CUP, Mònica Pàmies, ha defendido el sistema lleva a puerta por la recogida de basura, que de momento no se ha implementado en la ciudad. También ha pedido que la tasa de la basura tenga en cuenta el número de personas que viven en un inmueble y no solo los metros cuadrados.

Crespón negro por un alcalde franquista

El balcón principal del Ayuntamiento de Reus ha lucido desde miércoles el damasco de la ciudad con un crespón negro como muestra de luto por la muerte de Francesc Llevat, quien fue alcalde de la capital del Baix Camp durante la última etapa del franquismo. Levadura ocupó la batllia desde 1973 y hasta el 1977. Murió el pasado miércoles en la edad de 83 años.

ERC, que forma parte del gobierno municipal, se ha desmarcado del reconocimiento a través de un comunicado. Los republicanos han recordado que «su figura política está vinculada a un sistema represivo que anuló los derechos y las libertades». La formación reclama que los reconocimientos institucionales estén reservados a los alcaldes escogidos democráticamente.

Fuentes del ayuntamiento han explicado a ACN que estos tipos de homenajes siguen las directrices del protocolo de la misma institución local.

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