Agua
La sequía sigue haciendo saltar chispas
Durante la ponencia celebrada ayer en la Llotja de Reus el representante del departamento de Territorio tuvo que aguantar el tipo
Si hay un debate en el Camp de Tarragona que se pueda volver en casi un combate es, sin ningún tipo de duda, el agua. Y ayer el ring fue la Llotja de Reus durante la ponencia sobre la problemática del agua en el territorio y, concretamente, en los embalses del Riudecanyes y Siurana. Una relación históricamente compleja que, como se espera, la solución tendría que ser la estación regeneradora de agua (ERA) de la depuradora de Reus.
No obstante, de esta solución que señalan regantes y administración, Joan Tasias, ingeniero agrónomo, decidió pronunciar algunas dudas. «No sabemos la calidad del agua, cuál será el presupuesto final o cuántos hectómetros cúbicos. Tenemos que pensar que se ha empezado a redactar el proyecto», comentó el ingeniero, a la vez que le dejaba como un «encargo» a Xavier Villacampa, director de los servicios territorial de Territorio, dar respuesta a estas cuestiones.
Villacampa que, en este caso, estaba en el lado opuesto del ring y, viendo el contexto de un público con representantes de la Comunidad de Regantes de Riudecanyes y Unió de Pagesos, tenía las de perder. Al fin y al cabo, había venido a dar la cara y aguantar el tipo mientras respondía que no era posible llevar a cabo las soluciones planteadas por los campesinos.
Una de las opciones era que el agua del CAT pudiera ser utilizada para riego, una opción que descartó porque «en ningún momento en los estatutos del CAT establece que se pueda utilizar el agua para regadíos, porque si se apuntan unos, todo el resto de comarcas lo querrán, cuando todavía muchos pueblos están pidiendo conectarse al CAT».
Otra de las propuestas fue por parte de uno de los asistentes del público, Martí Macías, responsable del Agua de Unió de Pagesos en el Tarragonès, que planteó si las obras de la ERA de Reus se podrían tramitar por emergencia. Villacampa volvió a tener que hacer de abogado del diablo argumentando que no era lógico que después de llevar a cabo la redacción de un proyecto por vía ordinaria, este se ejecutara por emergencia: «cualquier interventor vendría y preguntaría que qué estamos haciendo». «No hay ninguna ley que lo prohíba, ni una», respondió Macías ante la negativa, indignado.