Ir en bicicleta no tiene que ser siempre igual
Las bicicletas reclinables hace años que existen pero aquí no son populares; las Halfbike combinan el mecanismo de las bicicletas convencionales y de los patinetes
Bicicletas de montaña, de paseo, de carretera, plegables, tándems, triciclos... Bicicletas hay de muchos tipos diferentes. Algunos son bastante habituales, pero otros son raros y poco corrientes en nuestra zona. Éste es el caso de las bicicletas reclinables, que a pesar de ser bastante habituales en países del norte de Europa y de América del norte, no son tan conocidas en España y en Cataluña.
Este tipo de bicicletas existen desde finales del siglo XIX, pero en nuestro país su presencia ha sido siempre prácticamente nula. La persona va sentada en una posición que forma un ángulo de más de 90 grados, y los pedales están situados más adelante que el manillar. Un mallorquín afincado en Zaragoza, Joan Miró, hace poco más de dos años que empezó a fabricarse para él mismo estas bicicletas. Las descubrió en una tienda de Zaragoza, y desde entonces ha creado hasta cuatro. De manera cotidiana sólo usa una. Todas ellas están hechas con material reciclado, e incluso tienen diferentes tipos de ruedas para cambiarlas según el uso más apropiado.
Este tipo de bicicleta, según Miró, es mucho más cómodo que el modelo convencional. Además, también asegura que la resistencia al aire es menor, de manera que se tiene que pedalear menos. Por el contrario, el precio en las tiendas suele ser de unos 1.000 euros, bastante más elevado que las bicicletas convencionales básicas, «que rondan los 200 o 300 euros».
Pero ésta no es la única bicicleta poco usual que se puede ver por las calles hoy en día. Con el auge de transportes como el Segway, ya sea con manillar o sin, y otros de similares, las bicicletas no se han quedado atrás y han querido sumarse a esta moda. Éste es el caso de las Halfbike, un transporte que combina el sistema de las bicicletas y de los patinetes convencionales o de los Segway con manillar. En este caso la persona va completamente de pie encima del aparato mientras se sostiene con el manillar, pero a diferencia de los patinetes y de los Segway, tiene que pedalear.