¿Tu conejo se ha quedado inmóvil, relax o estrés?

Los conejos se han convertido en un compañero habitual en nuestros hogares. Muchas personas han decidido incorporarlos como «mascota» de sus hijos. Sin embargo, se tiene que tener en cuenta que son seres vivos y tienen una serie de necesidades a tener en cuenta con el fin de asegurar su bienestar. Por desconocimiento, muchos propietarios de conejos creen que se trata de un roedor como cualquier otro, que requiere una jaula, comida y poco más. Pero no es así. Es importante saber señales que pueden indicar que el conejo está estresado o no, o en condiciones que se pueden mejorar.

Una de estas señales que a veces hemos visto en Internet en forma de vídeo, aparentemente divertido, es la inmovilidad de los conejos cuando les ponemos panza arriba, por ejemplo, tomando un baño. En realidad, este gesto no es nada bueno para el animal. Lo que le pasa es que está sufriendo inmovilidad tónica como mecanismo de defensa ante el miedo. En libertad, les puede servir para intentar reducir las heridas durante un ataque o escapar a lo que puede ser un depredador en una situación extrema. Por lo tanto, si tu conejo ha llegado a este punto es porque lo está pasando mal. Al contrario de lo que se cree, los conejos en este estado no están relajados. En un estudio conducido por Anne McBride, se determinó que, en este estado, el ritmo cardiaco y la respiración son más rápidas y los niveles de estrés aumentan.

Por este motivo, es mejor siempre evitar estas posiciones que generan malestar a nuestro compañero y tratarlo siempre con el máximo respeto.

Los conejos son animales muy sensibles e inteligentes. En libertad, se pasan el día moviéndose y con actividad diversa. El conejo necesita un espacio ancho y enriquecimiento ambiental, necesitan juguetes y material para corroer. Es muy importante también el ejercicio diario fuera de su jaula y, de ser posible, acondicionarlos un lugar en el que puedan estar en libertad y a protegidos de objetos con los qué puedan hacerse daño|dolor|mal. Es importante también mantener limpia la jaula, ya que los conejos agradecen la higiene. Una falta de higiene en la jaula puede ocasionar también estrés en nuestro amigo.

También es importante que los adultos enseñen a sus hijos que el conejo no es un juguete que manipular como quieran y es importante enseñar a respetar su espacio y tratarlo con suavidad.