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¿Cómo cuidar de los animales cuando se han hecho mayores?
Adoptar un perro o un gato adulto o viejo es muy buena opción tanto por el hecho de que es cuando más lo necesitan como porque será un compañero que nos hará la vida fácil
Los animales, igual que las personas, pasan por las mismas fases con respecto a la edad. Cuando son cachorros necesitan actividad, atenciones y límites, así como buenas dosis de paciencia para entender que están aprendiendo al igual que haría un niño. Y cuando se hacen mayores, tienen también toda una serie de necesidades específicas. Los animales grandes acostumbran a ser tranquilos y al contrario de lo que se piensa, aprenden rápidamente dado que ya tienen la capacidad de entender en gran medida qué le pide al ser humano. Por este motivo, adoptar un perro o un gato adulto o viejo es muy buena opción tanto por el hecho de que es cuando más lo necesitan como porque será un compañero que nos hará la vida fácil.
La entidad FAADA ha presentado todo un decálogo de consejos para cuidar de nuestro animal de compañía y ayudarlo a afrontar la última etapa de su vida de la mejor manera posible para vivir feliz.
En particular, destacamos que:
- «Aunque tu perro ya no sea un jovencito: sigue paseándolo y haciendo ejercicio. Eso sí, siempre a su ritmo y yendo con cuidado al excesivo frío o calor y a las señales de cansancio».
- «Asegúrate que tu perro pueda salir y hacer sus necesidades con más frecuencia y que tu gato tenga acceso a una caja de arena limpia|neta en todo momento».
- Ayúdalo a mantener la temperatura apropiada. Pueden acusar más intensamente el frío o el calor. Evita que pase por este incremento o descenso de las temperaturas. Abrígalo adecuadamente o, evita las horas de más calor e hidrátalo según el momento.
- Si hace falta, hazte con una rampa con el fin de poder subir al coche y evitar el esfuerzo que le puede implicar saltar hasta el vehículo. Tampoco permitas que tu perro dé grandes saltos desde el sofá o la cama|lecho.
- Si es grande y especialmente si tienes niños en casa o mucho movimiento, es bueno que «tu perro o gato tenga un lugar seguro, un escondite en el que refugiarse cada vez que necesite un poco de tranquilidad y quiera alejarse, por ejemplo, del ruido o de los juegos de tus hijos». Los cambios de comportamiento en el hogar también son típicos en perros mayores, se vuelven más afectuosos, más familiares y a veces incluso empiezan a tener miedo de quedarse solos, desprotegidos.
- Es importante también realizar revisiones veterinarias periódicas con el fin de tener controlado su estado de salud y poder ayudarlo a afrontar aquellos problemas de salud típicos de la edad. Igualmente, puede tener alguna enfermedad que nos pase desapercibida.
- También es muy importante escoger una alimentación de calidad En el caso de perros y gatos sénior, este requisito es todavía más importante. La edad adelantada puede llevar consigo trastornos digestivos o de cualquier otro tipo.
Y sobre todo, buenas dosis de cariño y un poco de paciencia para entender que como nosotros, hay cosas que nos cuesta más hacer cuando ya tenemos cierta edad.