¿Cómo ayudar a las protectoras de animales con la llegada del frío?

El otoño ya hace semanas que ha llegado y con éste, el frío y la humedad. Esta es de las épocas más duras para aquellas asociaciones y protectoras que se dedican a cuidar de todos aquellos animales abandonados. Es ahora un momento donde la ayuda del exterior es muy importante especialmente para aquellos animales más frágiles: los cachorros más pequeños, los más viejos y los que están enfermos o heridos o tienen alguna discapacidad que los hace más vulnerables.

Por este motivo, esta época es perfecta para hacer un esfuerzo con respecto a solidaridad con los animales más necesitados que llenan refugios y perreras. Algunas de las vías para colaborar son:

Hacer de casa de acogida

Esta es una de las mejores maneras de ayudar y cualquier asociación lo agradecerá enormemente. La humedad en el suelo de los refugios durante esta época es muy dura para los animales y no tiene nada que ver con el calor que puede ofrecer un hogar, aunque sólo sea los meses más duros. Por eso, una buena opción es acoger alguno de los animales que más lo necesitan. Los cachorros necesitan un entorno cálido para evitar contraer enfermedades como resfriados y crecer de manera saludable o incluso para darles el biberón. Los más viejos pueden tener problemas como el artrósis. Estar fuera de un entorno frío y recibir las atenciones diarias ayudará a minimizar estas dolències.

Material como mantas, colchones y elementos de abrigo

Evitar el frío y proteger a los animales que viven en el exterior es básico. Además del aprieto del abandono, el hecho de no tener la oportunidad de pasear a diario, la soledad de las jaulas o el estrés de tener que convivir con muchos más animales tienen que sentir frío y humedad. Igualmente, los gatos que llevan muy mal el frío y adoran estar en un entorno cálido. Las mantas, las camitas, las sábanas que ya no utilizamos o incluso pequeños colchones serán de una gran utilidad para las asociaciones.

Casetas de madera y transportines

Las casetas para refugiarse del frío que podamos tener de nuestros animales y ya no utilizamos serán perfectos para ayudar en un refugio. El refugio puede tener zonas donde no existe techo (en ocasiones por haber superado los espacios donde están refugiados los animales) y, las casetas serán básicas para poder refugiarse. Los transportines también serán de gran utilidad para los gatos, ya sea como camitas o para poder realizar el transporte.

Pienso y comida húmeda

Los perros y gatos, por regla general, tendrán que aumentar ciertos nutrientes durante el invierno, pues necesitan este plus de energía para generar calor y sobrevivir a las bajas temperaturas. Aportar latas y comida, especialmente, que tenga cierta calidad ayudará a que los animales estén mejor preparados para hacer frente a las bajas temperaturas.

Donativos

Los donativos siempre serán bienvenidos a las entidades protectoras que dependen en gran medida de estas para seguir cuidando de los animales y dando atención veterinaria a los animales.

Voluntariado

Esta época se caracteriza por la dureza climática, hecho que desmotiva o impide a menudo que los voluntarios puedan tener tanta disponibilidad como en otras épocas. Dar un apoyo, en función de nuestra disponibilidad, será de una gran ayuda por las entidades. Ayudar con la cura de los animales, ayudar en acontecimientos solidarios, realizar traslados en coche del material necesario... son muchas las maneras que podemos ayudar y repercutirán en el bienestar de los animales y las posibilidades de adopción.

Y aquellas entidades que se dedican a tener cuidado y proteger en los gatos de la calle, o gatos ferales, también las podemos ayudar aportando casetas y material a fin de que los animales de las colonias puedan tener refugio durante estos meses de invierno.