Ocho recomendaciones para evitar infecciones oculares este verano
En el agua del mar y de la piscina hay amebas y bacterias que pueden afectar a los ojos
La piscina, la playa, el agua del mar, el aire acondicionado, los ventiladores, los rayos del sol... No hay verano que se precie donde no se den cita uno, varios o todos estos elementos. Sin embargo, los expertos en oftalmología advierten que también son el origen de diferentes infecciones oculares por lo que es importante cuidar nuestra visión durante los meses estivales.
«Nuestros ojos pueden verse afectados por factores externos a los que nuestra visión no está acostumbrada. La zona ocular es muy sensible y durante el verano puede sufrir alteraciones si no se cuida correctamente y se atiende a una serie de recomendaciones oftalmológicas», afirma el doctor Ronald Sánchez, oftalmólogo y especialista del grupo de centros de salud ocular Miranza.
El experto explica que dentro del agua y de la piscina conviven amebas, bacterias y/o enfermedades contagiosas que pueden afectar a la salud ocular si nos sumergimos y abrimos los ojos en ella. «Estas infecciones pueden incluso derivar en afecciones graves produciendo úlceras o queratitis, que se pueden sobreinfectar con dichas bacterias o amebas. Los usuarios de lentillas son más susceptibles a estas lesiones, por lo que es importante no bañarse con ellas puestas».
El doctor recuerda que si se va a bucear es imprescindible el uso de gafas: «Su empleo evitará lesiones oculares como la queratoconjuntivitis irritativa o que se pronuncie alguna afección abierta que no nos ha molestado hasta el momento y que puede verse afectada».
Por otra parte, la exposición continuada al sol hace que durante el verano los ojos sufran más que el resto del año. La radiación de los rayos ultravioleta afecta al interior del ojo y puede provocar daños en la retina si se observa directamente, por lo que los especialistas recuerdan la importancia del uso de gafas de sol homologadas, así como tener en cuenta el filtro de la lente.
«El calor produce una desecación de la película lagrimal, principalmente por el uso del aire acondicionado o por la propia evaporación del entorno debido al calor. Para un correcto cuidado es importante tener una buena hidratación, evitar el contacto directo con las corrientes de aire y el uso de lágrimas artificiales», señala el doctor.
Por último, el doctor Sánchezresume en ocho sus
consejos básicos para mejorar la salud ocular y evitar infecciones o afecciones oftalmológicas durante el verano
:
- Limitar la exposición al sol.
- No usar lentillas para bañarse en la piscina o en la playa.
- Emplear siempre gafas de buceo para nadar en la piscina o en la playa.
- Evitar ambientes secos y mantener una correcta hidratación.
- No compartir toallas. Pueden contener infecciones contagiosas.
- Evitar el contacto con los ojos de cremas protectoras y, si este se produce, lavar con abundante agua.
- Lubricar bien los ojos durante los viajes en avión mediante el uso de lágrimas artificiales.
- Llevar una correcta alimentación a base de frutas y verduras y practicar ejercicio.