Las horas en las que se debería desayunar y cenar para reducir el riesgo de enfermedades
Cada experto o nutricionista dará, seguramente, una respuesta diferente
El sedentarismo, que se encuentra en niveles altos en España, así como la ingesta, cada vez más, de productos ultraprocesados hacen que el organismo se vea alterado generando en muchas ocasiones enfermedades.
Los estudios se centran, por tanto, en prevenir estas afecciones y en concienciar a la población de que las comidas que realizan son muy importantes en su día a día. Así es como a lo largo del tiempo, se ha puesto el foco también en las horas en las que se ingieren las comidas principales. España mantiene un ritmo de vida algo diferente con respecto al resto de europeos y, así, el clima, las horas de luz y el inicio de las jornadas laborales hace que las horas para alimentarse sean más tarde.
¿A qué se recomienda desayunar y cenar?
Cada experto o nutricionista dará, seguramente, una respuesta diferente. Y, es que, son diversas las opiniones que se pueden hallar. Por un lado, hay aquellos que se basen en el principio de toda la vida: realizar todas las comidas en un intervalo de 12 horas. Lo normal para muchos es que el día empiece con un desayuno a las 8 y se termine con una cena a las 20.
Por otro, hay aquellos que hablan de adaptar la alimentación según las necesidades de las personas, por ejemplo, para los trabajadores nocturnos. No obstante, en lo que sí coinciden muchos de los expertos es en hacer las cenas dos horas antes de dormir, ya que se ha demostrado que tiene beneficios muy buenos para la salud y para la prevención de algunos tipos de cánceres.
Y además, también se ponen en común en el hecho de realizar las cinco comidas recomendadas (desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena) y elegir los mejores alimentos para cada una de ellas. Mientras que en el desayuno la carga de proteína debe ser más elevada, en la cena habrá que evitar ingerir productos muy pesados y en grandes cantidades.
Además, los expertos sitúan que el mejor desayuno es el que se hace antes de las 9.30, y siempre que se haya dejado de reposo una hora entre levantarse y comer. El cuerpo metaboliza mucho mejor en las primeras horas de la mañana, por lo que obtendrá toda la energía en ese momento.
¿Qué enfermedades se pueden prevenir?
Aunque pueda haber variedad de opiniones, los estudios realizados sí que han demostrado que llevar una alimentación con un tiempo cuidado previene enfermedades. De hecho, en los últimos años se han llevado a cabo varias investigaciones tanto en humanos como animales sobre la Alimentación restringida en el tiempo (TRE), que no debe ser confundida con el ayuno intermitente.
Los estudios realizados por el Instituto Salk y la Universidad UC de San Diego, arrojaron en los resultados de sus investigaciones un hallazgo muy beneficioso para la salud. Con tan solo hacer todas las comidas en un período de 10 horas se pudo demostrar que personas con enfermedades como la Diabetes Tipo 2, la hipertensión o el colesterol pudieron reducir niveles como el azúcar en sangre, los triglicéridos anormales y la presión arterial alta. Y, por tanto, experimentaron una mejora en su salud.
Lo que destacan muchos expertos es que, desayunando a la mejor hora de metabolización y cenar antes de que nuestro cuerpo entre en modo reposo (a partir de las 20 horas los alimentos son absorbidos más lentamente), también presenta muchos beneficios en la pérdida de peso. Si nuestro cuerpo se encuentra en su figura más saludable por una buena alimentación, tendremos menos riesgo de padecer enfermedades metabólicas, relacionadas con el sobrepeso y la obesidad.