Salud
Un hospital catalán incorpora una tecnología pionera que permite confirmar el cáncer de pulmón en zonas hasta ahora inaccesibles
Se trata de una prueba diagnóstica para descartar o asegurar un diagnóstico cuando se ha identificado un nódulo
El Hospital de Santa Creu i Sant Pau ha incorporado una tecnología pionera que permite confirmar o descartar el cáncer de pulmón en zonas que hasta ahora eran inaccesibles. Se trata de la broncoscopia por navegación electromagnética bronquial (NEB), un proyecto financiado por el Departamento de Salud. Hasta ahora se han beneficiado más de medio centenar de pacientes.
No es una prueba de detección precoz sino que se trata de una prueba diagnóstica para confirmar o descartar el diagnóstico cuando se ha identificado un nódulo en el pulmón, ya sea a través de una prueba de cribado o en una exploración hecha por síntomas pulmonares o rutinaria por otro motivo, como puede ser un preoperatorio.
La coordinadora de la Unidad de Broncoscopia y Neumología Intervencionista de Sant Pau, la doctora Virgina Pajares, ha subrayado que con esta tecnología se puede llegar a zonas periféricas que antes eran inaccesibles. Por lo tanto, se pueden abordar aquellos nódulos que quedaban fuera de la visión endoscópica.
Ahora se puede hacer un diagnóstico previo mediante punción, biopsia u otras herramientas, como las sondas de crioterapia. Pajares ha destacado también que se puede hacer un abordaje multidisciplinar, ya que de forma coordinada con el equipo de cirugía torácica es posible el marcaje de lesiones periféricas con el objetivo de facilitar la localización y posterior resección del nódulo pulmonar mediante cirugía robótica o videotoracoscópica.
Buenos resultados
El hospital ha utilizado ya esta tecnología en 50 casos. El rendimiento diagnóstico obtenido es de hasta el 80%, ante el 20-30% de la broncoscopia convencional. El centro ha destacado que esta tecnología abre un camino importante en las posibilidades diagnósticas, incluso en nódulos inferiores a un centímetro.
Además, optimiza el abordaje terapéutico ya que permite el marcaje del nódulo pulmonar antes de su resección, especialmente en nódulos no palpables y mediante técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas. Eso es beneficioso porque los nódulos pulmonares son una de las manifestaciones del cáncer de pulmón y su detección y diagnóstico puede permitir el tratamiento en estadios iniciales.
Otro objetivo clavo de la broncoscopia por navegación electromagnética es reducir el porcentaje de pacientes que llega a un tratamiento quirúrgico o radioterápico sin un diagnóstico previo, que actualmente oscila entre el 10% y el 15%.
Hasta ahora, la gran mayoría de los nódulos pulmonares periféricos se detectan a raíz de un gran abanico de pruebas diagnósticas o preoperatorias. Por ejemplo, un paciente al que se le hace una prueba por una contusión torácica. Además, más del 70% de los cánceres de pulmón se detectan en una fase avanzada o muy avanzada sin posibilidad de tratamiento quirúrgico.
De acuerdo con las estadísticas del Global Cancer Observatory (Globocan), a la población general el cáncer de pulmón fue la principal causa de muerte, con el 18% (1,8 millones de defunciones), cifra que equivale casi a 1 de cada 5 muertes por cáncer.
El tercero más frecuente en Cataluña
En Cataluña, el cáncer de pulmón es el tercero más frecuente tanto en hombres como en mujeres, con casi 4.000 casos en hombres en el 2022. Eso supone el 64,4% del total de casos diagnosticados durante el 2022 en hombres. En mujeres, se registraron 1.172 casos el mismo año, un 59% del total. En el 2022 se ha estimado que se produjeron en Cataluña 16.730 defunciones por cáncer, de las que 6.870 de mujeres y 9.860 de hombres. El de pulmón fue el que registró más muertes entre los hombres (2.575) y el tercero entre mujeres (871).
El Departamento de Salud ha financiado este proyecto a través del Programa Compra Pública de Innovación en Salud. Es, pues, uno de los 18 proyectos de innovación incluidos en esta iniciativa, que contempla un contrato de riesgo compartido con el proveedor y que plantea un procedimiento de compra pública en base a los resultados mediante el pago por uso con una tarifa variable en función del diagnóstico del paciente (si el diagnóstico confirma que hace falta un tratamiento de cirugía o radioterapia, el coste de la prueba es inferior al coste medio).