Diseñar un espacio infantil para promover la creatividad y el juego

Jugar y crecer van de la mano, disponer de un espacio especial donde puedan dejar volar su imaginación es importante. Los niños necesitan un espacio para relajarse, jugar o crear un mundo propio donde se sientan cómodos. Si disponemos de espacio libre, crear una habitación de juegos es una solución fantástica para separar los ratos de descanso de la diversión y el ocio promoviendo un tiempo de juego y diversión. Existen diferentes estilos para crear este espacio que nos pueden servir de inspiración.

Podemos crear un estilo bohemio con alfombras retro y muebles vintage combinados con elementos modernos, en un diseño que también tiene un punto de ecléctico.

El estilo rústico es muy cálido y acogedor para los niños. Es un aspecto campestre que otorga un aire natural en el espacio. Destaca sobre todo por el uso de la madera en los elementos decorativos de manera que se aprecie de forma notable las texturas de este materuak y sus diferentes matices cromáticos.

El estilo nórdico , por su sencillez es una tendencia que continúa al alza. Sobre una base blanca, podemos añadir detalles de color pastel. Entre los detalles podemos incorporar guirnaldas o banderitas. Hay centenares de ideas porque es una tendencia que no dejamos de ver a los establecimientos.

Por otra parte, no hay que renunciar al espacio de juego si no disponemos de una cámara destinada a este uso. Si el espacio es pequeño, es lo más importante dedicar un tiempo a pensar como organizar los juguetes con el fin de no perder ni un centímetro. Recuperar el espacio y mantener la orden es vital una vez que tus hijos acaben con sus actividades.