«Odio el móvil de mi mamá y desearía que no tuviera»
Los adultos pueden limitar el uso del dispositivo tomando una serie de medidas que repercutirá en la relación con los hijos
WhatsApp, Instagram, Twitter, correo electrónico, Facebook y multitud de Apps para retocar fotos, para informarnos, para buscar viajes, productos, para vender... y todo sin retirar la vista de la pantalla. Y lo consultamos a todas horas, incluso cuando nos levantamos o cuando caminamos por la calle y este comportamiento a menudo provoca que perdamos la atención a la gente que nos rodea. Sin embargo, qué pasa cuando aquellos que nos rodea son nuestros hijos.
Como aparte de un ejercicio en clase, la maestra de segundo grado en Luissiana, Jen Adams , según la BBC, le pidió a sus alumnos que escribieran un breve ensayo con la siguiente temática: ¿Si hubiera una invención que desearías no existiera, cuál sería?
«Si tuviera que decir que invento no me gusta, mi respuesta sería el móvil de mis padres porque están todo el día con él (...) Odio el teléfono de mi madre y desearía que ella no tuviera uno. Lo odio», es la respuesta que dio a uno de los niños poniendo de manifiesto el uso excesivo del móvil de los padres enfrente de los hijos.
En concreto, este experimento dio como a resultado que varios alumnos manifestaran que la invención que no les gustaría que hubiera existido sería el móvil de sus padres. La foto, publicada el viernes pasado, habría sido compartida más de 170.000 veces antes de que la maestra la retirara. E igual que ella muchos eran los padres y otros maestros los que se sorprendieron ante una evidencia cada vez más frecuente.
Varias investigaciones han demostrado que a consecuencia del uso excesivo de los móviles, los padres hablan cada vez menos con sus hijos, lo cual está provocando problemas en el comportamiento de los pequeños y afectando a la relación afectiva entre padres e hijos. Los expertos apuntan que además, dado que los niños reproducen lo que ven, el móvil se convierte en su forma de comunicación y acaban enganchándose a él.
¿Qué medidas podemos tomar para reducir esta adicción?
Buscar un lugar para dejar el móvil
Dejarlo allí especialmentecuando estamos con nuestros hijos. Dejarlo en un lugar y centrar nuestra atención en el tiempo con los niños.
Fijar un horario
El teléfono te hace estar pendiente constantemente de clientes, familiares y amigos. Si marcamos un horario nos permitirá estar disponible para los temas más importantes y relativizar el resto.
Desactivar las notificaciones de las redes sociales
Muchas veces no podemos resistirnos al resplandor de la pantalla aunque se trate de una notificación sin importancia. Acceder en las redes sociales solamente cuando nosotros queremos reducirá el consumo.
Silenciar los grupos de Whatsapp
No es necesario estar disponible las 24 horas del día. Podemos comunicar que a determinadas horas estamos con nuestros hijos. En caso de una urgencia la gente siempre puede llamarnos.
Intentar sustituir los mensajes de texto por llamadas
En muchas ocasiones dedicamos incluso horas a un tema que podría cerrarse en una breve llamada telefónica.
En definitiva, las medidas son optativas pero el autocontrol es vital a fin de que los niños se sientan acompañados y podamos ser un ejemplo de un uso responsable del dispositivo.