Una placa delante de Casa Sefus alaba el legado del historiador Jordi Rovira
El acto sirvió para repasar algunos de los trabajos del desaparecido, ayer tarde.
«El Jordi poliédrico, polifacético, brillante y polémico nos dejó en un lugarque tanto amaba, delante de la Casa Sefus». Así es como la exconcejala del Ayuntamiento de Tarragona, Victòria Forns, recordó ayer el traspaso del historiador y presidente de la Reial Societat Arqueológica Tarraconense. Miembros de esta entidad, del Ayuntamiento de Tarragona y la hermana del desaparecido lideraron un acto de homenaje y reconocimiento al trabajo del historiador Jordi Rovira e inauguraron una placa en su honor, ayer tarde.
El secretario de la Reial Societat Arqueológica Tarraconense, Òscar Martín, destacó también su carácter temperamental. A la vez, sin embargo, recordó que «era una persona muy generosa con sus amigos, pero también era un enemigo encarnizado de sus enemigos». Por su parte, el concejal de Cultura, Josep Maria Prats, dio un repaso del trabajo historiográfico que Rovira había dejado en la ciudad y destacó estudios como «el Mausoleo de Jaime I». También tildó al historiador, arqueólogo y bibliófilo como «predicador del legado tarraconense». El alcalde de la ciudad, Josep Fèlix Ballesteros, se mostró sorprendido por «la gran cantidad de gente que ha venido». Así, consideró que «es un homenaje merecidísimo, donde se demuestra que tenía muchos amigos. Era un hombre polémico, yo había discutido mucho con él, pero también habíamos llegado a grandes consensos». También agradeció la presencia de la hermana de Jordi Rovira y aseguró que los actos en memoria y de alabanza a los trabajos hechos continuarán en el tiempo. «Fue una de las primeras personas que vio claro que detrás del patrimonio hay industria cultural y, por lo tanto, hay oportunidades económicas», añadía.Forns utilizó el recurso de la metáfora para asegurar que «era un hombre construido sobre roca maciza y que no se mostraba nunca indiferente». Rovira murió repentinamente el pasado 6 de octubre del 2014, cerca del punto que ayer reunía decenas de personas en un acto más de adiós, pero también para mantener su memoria más viva que nunca.