Una decena de familias de las parcelas Iborra quieren evitar que se derriben sus viviendas
El plenario del viernes aceptará la cesión de Fomento del tramo de la antigua variante de la N-340 en la zona de la Vall de l'Arrabassada
Los vecinos de las parcelas Iborra se resisten a abandonar la zona.
El Ayuntamiento de Tarragona da un primer paso para impulsar el desarrollo urbanístico de parte de la zona de Llevant. El plenario de este viernes busca aprobar la cesión del Ministerio de Fomento del tramo de la antigua variante de la carretera nacional 340 en la zona de la Vall de l'ArrabassadaEste hecho llega cargado de polémica, ya que hasta diez familias viven con impotencia el futuro derribo de sus viviendas, situadas cerca del estadio del Nàstic. Los afectados viven, concretamente, en la zona conocida como parcelas Iborra y estos se resisten a abandonar sus viviendas a raíz del Plan de Ordenación Urbana Municipal (POUM). En total, hasta diez familias viven con malestar y, algunos, lamentan vislumbrar la resignación, ante el futuro derribo de su casa.
Hace un mes, representantes del Ayuntamiento se reunieron con los afectados y les prometieron que velarían por ellos y les buscarían viviendas alternativas situadas cerca del campo del Nàstic. Sin embargo, varios vecinos reivindican la necesidad de recibir por escrito el acuerdo entre el Ayuntamiento y los afectados, en el cual se defina las contraprestaciones, es decir, «cuál será el intercambio de propiedades y que quede claro el traspaso de estas en caso de que se trate de una herencia», según destaca el vecino Daniel Arfelis. De hecho, reivindica que «estamos dispuestos a hacer las modificaciones pertinentes a nuestras viviendas y arreglarlos en consonancia con el entorno. No queremos marcharnos, nuestros padres son gente que ha trabajado toda la vida para poder vivir y mantener su vivienda y no tiene sentido que ahora nos hagan fuera».
La cesión de Fomento del tramo de la antigua variante CN.340 es el primer paso para la urbanización de toda una zona que se desarrollará a través de dos planes de mejora urbana, el del Nàstic y el de las parcelas Iborra.
La portavoz socialista, Begoña Floria, explicó ayer que «el desarrollo urbanístico de esta zona se alargará entre ocho y diez años y ahora hacemos el primer paso. El plan de mejora del Nàstic ya está terminado, mientras que el de parcelas Iborra se empezará a trabajar pronto». Además, aseguró que se podrá empezar a trabajar para urbanizar este tramo de la antigua variante, después de la celebración de los Juegos Mediterráneos, llevarán hasta el segundo semestre del 2017.
La longitud de este tramo es de 780 metros y está situada entre la actual circunvalación y la Vía Augusta. Hay que destacar que se prevé la construcción de 750 viviendas en esta zona que también incluye un espacio para equipamientos.
«No nos han dejado hacer reformas»
Entre los afectados aseguran que hace más de diez años que piden la autorización para instalar el alcantarillado, pero que desde el consistorio se lo han impedido. La vecina Maria José Galiana subraya que «nos han acusado, en varias ocasiones, de no haber arreglado los espacios, pero la verdad es que no nos han dejado».Además, lamenta que «nos quieren echar, ya sea de buenas maneras o todo el contrario». En este sentido, asegura que «somos familias humildes y, buena parte, son personas de edad avanzada que sufren porque ven que se han esforzado toda la vida para tener una casa».
El vecino Daniel Arfelis destaca que «estamos dispuestos a poner en marcha una cooperativa de vecinos para ayudarnos mutuamente y alcanzar el dinero necesario para llevar a cabo las reformas que sean necesarias de la futura urbanización». Los vecinos esperan que el consistorio les entregue un acuerdo escrito en menos de un mes.