Las enfermeras exigen que las ratios se igualen al resto de Europa

El número de enfermeras que se suman a las colas del paro no deja de crecer, según informó al sindicato de Infermeres, Satse. El informe publicado Análisis del Empleo|Ocupación en Enfermería, augura que la cifra de enfermeras paradas no dejará de crecer en los próximos años, calculando que llegará al 15% en Cataluña, una pérdida de 30.000 profesionales de la enfermería en menos de dos años.

Cati Ródenas, Secretaria Provincial de SATSE Tarragona, destacaba que la causa principal de la devaluación de la enfermería son las ratios de enfermera por habitante. Ródenas explica que Tarragona, pero también todo el Estado, se encuentran muy por debajo de la media europeas. Actualmente hay 574 enfermeras para|por cada 100.000 habitantes, y la media en Europa se sitúa en 811 enfermeras.

El número de puestos de trabajo de enfermería ha vivido una reducción drástica fruto de los recortes, y hay plazas que han quedado vacantes y no se han llegado a cubrir nunca. Con Ródenas coincidía Cristina Díez, la presidenta del Colegio de Enfermeras de Tarragona, en que advertía que las profesionales están asumiendo muchas más tareas de las que les corresponde, por falta de personal. Eso podría afectar a los resultados y, por lo tanto, a los pacientes: «el estrés y la tensión de soportar una carga tan superior, pueden paso factura», decía Díez.

Además, la presidenta también defendía que las enfermeras realizan entre el 92% y el 95% de la atención a los enfermos en los hospitales, y que estos, tienen una enfermera a su disposición a cualquier hora y cualquier día. «Las veinticuatro horas y trescientos sesenta y cinco días al año hay una enfermera atendiendo al enfermo, además de las visitas a domicilio, la asistencia a los médicos y muchos trabajos más,» afirmaba.

Por este motivo, ni el sindicato ni el Colegio entienden que el número de enfermeras por habitante sea inferior a la media europea, y en cambio el de médicos por habitante sea superior. Sin despreciar la tarea de los médicos, defienden que las enfermeras tienen mucho más trato con el paciente. Realizan todos los cuidados|curas y se encargan de la prevención de enfermedades, por ejemplo, con las vacunaciones y el seguimiento a enfermos crónicos. En Cataluña hay 1,3 enfermeras para|por cada médico, mientras la media europea se sitúa en 2'8, según los datos de la OCDE, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, que agrupa 34 países.

Díez explicaba que «el trabajo de los médicos es otro. Los cuidados|curas y el seguimiento del paciente es trabajo de las enfermeras, además de la colaboración con tareas del médico». Asegura que, con más número de enfermeras se podrían realizar más visitas a domicilio de seguimiento de enfermos y, por lo tanto, se ahorrarían visitas a Urgencias.

Segundo Díez: «una sociedad con más enfermeras es una sociedad con menos enfermos», porque, para|por la presidenta, es una sociedad donde la salud recibe más atención de larga duración.

Ródenas opinaba que las ratios tan bajas del sector se corresponden, más allá de la crisis económica, a una desvalorización de la profesión. Considera que las enfermeras «no están lo bastante valoradas, no se tiene en cuenta su esfuerzo ni sus aptitudes».

No hay masas graduados

El estudio de Satse concluía que existen masas profesionales, y que actualmente se están graduando estudiantes de enfermería que ya saben que no podrán encontrar trabajo en su campo. Por lo tanto, el estudio propone que se reduzca el número de graduados y de escuelas donde se ofrecen los estudios de enfermería. Las dos representantes del colectivo en Tarragona, sin embargo, coincidían en que esta no sería una solución factible a Tarragona, ya que en toda la provincia sólo hay las facultades de Tarragona, Tortosa y El Vendrell.

Ródenas explicaba que, con el fin de solucionar la gravísima situación de paro del sector, la única solución efectiva a Tarragona es la de cumplir con las ratios necesarias en hospitales y centros, ya que, si se consiguiera «en cuestión de años dejaría de haber enfermeras sin trabajo. En cuestión de años se reducirían las listas de parados|pasmados a cero».

Díez, sin ser tanto optimista, estaba de acuerdo en que los centros de formación no son el problema, y que adoptar las ratios adecuadas es la única salida.

Además, Ródenas y Díez explicaban que los profesionales de Tarragona y Cataluña son de los mejor formados de toda Europa, y que desde el extranjero las enfermeras provenientes de universidades catalanas son de las más cotizadas.

Con el fin de poder ejercer, las enfermeras tienen la obligación de colegiarse. Actualmente, el Colegio de Enfermeras de Tarragona cuenta con 3.790 colegiados en toda la provincia, de los cuales calculan que la mayoría están en activo.