La remodelación del interior del palacio municipal se iniciará a principios de abril

El Ayuntamiento de Tarragona tiene previsto iniciar las obras de remodelación del interior del Palau Municipal a principios de abril. Esta fase está presupuestada en poco más de 2 millones de euros y tiene que permitir desencallar un proyecto que quedó parado por problemas económicos, el año 2010, y pordiscrepancias sobre el plan funcional de estos trabajos. El concejal de Urbanismo, Josep Maria Milà, explica que «las obras empezarán a principios de abril y podrían alargarse hasta finales de año».

El objetivo del consistorio es reformar el ala este del edificio y optimizar el uso de los espacios a fin de que se pueda concentrar el mayor número de trabajadores municipales y, por lo tanto, propiciar un ahorro económico. «Calculo que, con las obras, se podrá disponer de un espacio para 170 trabajadores», detalla Milán. Hay que recordar que el proyecto inicial de la remodelación se ha modificado también a raíz del traslado del Archivo Municipal en el edificio de la Tabacalera y con el crecimiento del número de grupos políticos. Además, las obras tienen que servir para finalizar la cubierta y los cierres de las aperturas|aberturas de fachada que dejan el edificio desproteger, así como para detener filtraciones de agua –procedentes de elementos meteorológicos– que hace tiempos estropean el ala derecha.

Los trabajos supondrán un refuerzo estructural de toda el área este –la zona del Patio Jaume I-, una obra adyacente a las calles Salines y Rera Sant Domènech. A la planta baja irán servicios WC públicos, una sala de formación y otras instalaciones todavía para concretar el uso. Al entresuelo irán oficinas y servicios de WC por trabajadores, y en la primera planta está donde habrá los despachos paralos grupos políticos con los respectivos lavabos. Finalmente, en la segunda planta se ubicarán más oficinas y más lavabos. Las plantas estarán conectadas por un ascensor. En este sentido, se conseguirá mejorar el acceso para las personas con movilidad reducía. El concejal reconoce que «actualmente, sólo hay un ascensor disponible y el usuario necesita que alguna persona lo acompañe, porque queda muy escondido dentro del edificio». Los trabajos también requerirán el derribo de una escaleradel ala derecha que no cumple la normativa vigente.

Por otra parte, Milán destacó que, una vez terminada esta rehabilitación, «tendremos que afrontar la mejora de la reforma de la fachada del palacio. Sobre todo habrá que empezar por la de la calle Rera Sant Domènech, que es la que está más perjudicada porel paso del tiempo».