Familia, diversión y naturaleza, las claves|llaves para disfrutar al máximo de la Mona
Los tarraconenses se reunieron en el Parque del Francolí y al Parque Ecohistòric del Pont del Diable para vivir esta celebración
Un buen corte|trozo de Mona y aire libre. Esta ha sido la receta que muchos tarraconenses han seguido para celebrar el lunes de Pascua. Las zonas verdes de la ciudad se han llenado de gente desde primera hora de la mañana para disfrutar del último día de las vacaciones de Semana Santa, un día marcado por los ratos en familia, el esparcimiento|recreo y las monas. El Parque Ecohistòric del Pont del Diable y el Parque del Francolí han sido dos de los lugares|sitios recurrentes para vivir esta celebración.
A pesar de las nubes, décimas y décimas de tarraconenses han madrugado para encontrar la ubicación perfecta para pasar la jornada. Mesas|Tablas y sillas plegables y niños jugando a fútbol han invadido el Parque Ecohistòric del Pont del Diable. La mayoría del presente es fiel y cada año escogen esta zona verde para disfrutar del día de la Mona. «Es una tradición familiar», explican miembros de la familia García Alcañiz. Y es que hace cerca de 40 años que visitan el Puente del Diablo para|por Pascua. Los motivos: «Es práctico por|para la proximidad con la ciudad. Todo está muy limpio|neto y por la tarde podemos jugar con los niños a juegos tradicionales como saltar a la comba o al pañuelo».
Un caso muy parecido es el de la familia Tules Rodríguez. Padres, suegros, hermanos y cuñados se han reunido en este parque para vivir una festividad en familia. Este año, el encuentro ha contado con un nuevo miembro: la Cloe, un bebé de sólo 22 días que con su presencia ha asegurado que la tradición se mantendrá viva una generación más.
Los Tules Rodríguez ya habían visitado el Parque en familia el Viernes Santo para buscar tomillo. Pero no han sido los únicos que han repetido los dos días. La familia Moreno también pisaron el bosques próximos al Puente del Diablo para coger esta hierba aromática el viernes y han vuelto el lunes para comer. «Es de buen tarraconense venir aquí», ha sentenciado con rotundidad Antonio Moreno, y ha añadido que «está cerca de Tarragona y si está muy bien, porque en el Llorito está lleno de gente». Justamente por este motivo, los Martín Alises han decidido ir al Puente del Diablo a «comer, comer la Mona, y dar un paseo para quemar todo lo que se ha comido».
Proximidad y carácter familiar
Si bien cerca de las 9 de la mañana los tarraconenses ya empezaban a acampar en el Parque Ecohistòric del Pont del Diable, a la misma hora, las mesas|tablas del Parque del Francolí ya estaban muy llenas. Los más matinales han sido los Arias Vidales, una familia latinoamericana que desde su llegada a la ciudad venden al parque a disfrutar del lunes de Pascua. «A las 5:30 de la mañana hemos llegado y estaremos hasta por la tarde. Para|Por nosotros, es un lugar|sitio muy especial. Nos gusta porque los niños pueden jugar y porque tenemos espacio para juntarnos los 30 que somos», comentaban.
El carácter familiar del parque y el hecho de estar dentro de la ciudad son los dos alicientes que hacen que cada vez más tarraconenses lo escojan para pasar la jornada. Para los Sánchez Martínez, esta estuvo la primera vez que han celebrado la Mona en el Parque del Francolí. «Antes íbamos fuera pero somos de Tarragona y el parque es muy práctico y está muy bien, especialmente para los niños».
Monas de todo tipo
Las mantas para extender en tierra y las fiambreras con la comida han sido dos de las indispensables durante el día. Pero si ha habido una protagonista clara, este ha sido la Mona. Con mermelada, sares, de chocolate o de las tradicionales con huevos. Sean cuáles sean, las monas han presidido las mesas|tablas durante las comidas de la festividad del lunes, y con ellas las ganas de disfrutar de la familia y de los amigos. Así lo expresaban los miembros de la familia Hernández Torres: «Venimos para pasar un buen rato».