El 60% de los profesores tarraconenses han sufrido agresiones en las aulas
El sindicato de profesores de secundaria dice que el problema es el sistema educativo y la falta de apoyo de la Administración
El territorio, sin embargo, se encuentra por debajo de la media catalana, que es casi del 70%. El estudio demuestra que la densidad de población es un factor relevante. Los docentes en el área metropolitana de Barcelona son los más castigados por este tipo de conductos, y los de Lérida los que menos, muy cerca de las cifras tarraconenses, con sólo el 57% de los encuestados habiendo sufrido situaciones agresivas.
Aun así, es preocupante que en cualquier territorio catalán el número de docentes que han vivido esta situación es superior a los que no lo han sufrido. Los docentes más afectados por violencia física o verbal en las aulas son los de educación secundaria, ya que, en toda Cataluña, el 74% de los profesores de ESO han sufrido agresiones. La franja de edad de secundaria es la que más agrede verbalmente, un 49% del total, pero no destaca en número de agresiones físicas, que realiza el 35%. Los profesores de primaria e infantil son los que más sufren agresiones físicas, pero en bachillerato y formación profesional esta violencia es casi inexistente.
Un mal sistema educativo
Desde el sindicato de profesores de secundaria (ASPEPC), explican que es normal que los profesores que se encuentran en una situación de más riesgo son los que están en contacto con adolescentes y preadolescentes.
Fina Tudó, secretaría de Organización del sindicato, valoraba que el problema recae en la falta de reacción por parte del gobierno catalán: «El departamento de Enseñanza nunca ha hecho nada mínimamente aceptable para conocer los motivos de estos comportamientos». Denunciaba la falta de sensibilidad de la administración pública hacia los docentes de secundaria, ya que «siempre se culpa al profesorado de qué no sabe hacer su trabajo, cuando lo que pasa es que el sistema educativo es una pifia». Tudó pedía que la administración estudie los motivos por los cuales la violencia en las aulas es habitual, con el fin de llegar a la raíz del problema, en lugar de culpar directamente al profesor.
«Los profesores de ESO reciben insultos y amenazas de los alumnos prácticamente de forma diaria», denunciaba a la sindicalista, y los datos del estudio lo corroboran. Más de la mitad de los encuestados (51, 3%) dicen recibir faltas de respeto a menudo o muy a menudo, mientras que los insultos y las amenazas son un hecho más ocasional. Además, un porcentaje similar de los encuestados consideran que nunca han recibido apoyodel Ensenyamentdelantede una situación de conflicto, y sólo un 10% cree que lo ha recibido siempre.
Según Paloma Torcaz, los profesionales de secundaria están preparados y formados, «con las excepciones inevitables, como cualquier sector, que hay de todo», así que no es la causa de la violencia en las aulas. Un posible motivo, decía, «es que se está diluyendo la tarea del profesor. No somos los padres, los tutores legales, ni los hermanos mayores|grandes» y explicaba que hasta que eso no se reconozca «vamos camino a ser de los peores mundialmente». El estudio propone que el principal problema es la dificultad de las familias por|para educar a los hijos y que el docente tiene una mala imagen pública.