El Institut Català de la Salut pide disculpas a la mujer que no fue atendida al CAP la Granja
El ICS investigará por qué el CAP no atendió a la usuaria
El InstitutCatalà de la Salut (ICS) pidió disculpas «por las molestias percibidas a la mujer no atendida en el Centro de Atención Primaria de La Granja, en Torreforta, el pasado viernes 15 de abril. «La atención sanitaria urgente está garantizada para todos los ciudadanos en todos los centros sanitarios del ICS», informaban a través de un comunicado, en el cual también explicaban que se están investigando las causas por las cuales se rechazó la atención a la mujer en el CAP, obligándola a trasladarse al Hospital Joan XXIII para ser atendida.
La Gerencia Territorial del ICS Camp de Tarragona explicaba que utilizan una política de atención sanitaria marcada por el Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya, tanto al Hospital Joan XXIII como a los dispositivos de Atención Primaria. «El Real decreto 1192/2012, de 3 de agosto, determina que los ciudadanos empadronados que no tengan reconocido el derecho a la asistencia, tendrán derecho de acceso a las urgencias», dicen, en más de concretar que también aplican la ley de acceso a la asistencia sanitaria de cobertura pública de Cataluña, que en el artículo 3 explica que «las personas que se encuentran en Cataluña tienen derecho, en cualquier caso, a la asistencia sanitaria de urgencia si contraen enfermedades graves o tienen accidentes, cualquiera cuál sea su causa, y a la continuidad de esta atención hasta la situación de alta médica».
El ICS Campo de Tarragona, pues, tiene que garantizar la asistencia sanitaria urgente, en todos los casos, a cualquier ciudadano que acceda a sus centros sanitarios, como proveedor de salud del Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya.
La mujer, de veinticinco años se dirigió al centro de atención primaria con un sangrado vaginal y dolores agudos abdominales, solicitando asistencia de ugències. Cuando manifestó que se había olvidado la tarjeta sanitaria en Navarra, donde reside, el personal administrativo se negó a atenderla si no pagaba 60 euros. La mujer explicó que no disponía de esta cantidad, razón por|para la que finalmente no recibió ninguna atención sanitaria.
La mujer, se había dirigido al CAPacompañada de su cuñada, que reside en el barrio de Torreforta y es activista de la PAH, y ante la denegación de asistencia se pusieron en contacto con el Grupo de Trabajo de Defensa de la Sanidad Pública, ya que el pasado enero los dos colectivos habían llevado a cabo una charla conjunta sobre exclusión sanitaria. Dos trabajadoras las acompañaron a urgencias de l Joan XXIII, dónde proporcionaron atención sin ningún impedimento.