Denuncian el riesgo para|por los agentes de la Guardia Urbana porque las emisoras fallan a menudo

Los fallos en las emisoras de la Guardia Urbana persisten. Segon denunciaba la Asociación Sindical de Empleados Municipales Independientes de Tarragona, este miércoles a través de un comunicado, los problemas de comunicación entre agentes y la central de la comisaría no se han resuelto. De hecho, no es la primera vez que trabajadores del cuerpo de la Guardia Urbana denuncian esta situación, ya que el año pasado también lo hacía el Sindicato Profesional de Policías Municipales de Cataluña (SPPM-CAT). En esta ocasión, el delegado sindical de Asemit, Jordi Pallàs, explicó que «nos sabe muy mal que, a través de los medios, el concejal de Seguridad hubiera dicho que todo estaba solucionado porque no es así». Concretamente, el pasado 22 de junio, el Ayuntamiento de Tarragona emitió un comunicado a través del cual el concejal de Seguridad Ciudadana, Pau Pérez, detallaba que «hemos mejorado la red de comunicaciones para solucionar los puntos oscuros de cobertura que todavía teníamos».

Pero Pallàsdefendía que «los problemas de comunicación se han repetido en los dos últimos años, desde que nos trasladamos a la nueva comisaría». Entonces, el consistorio tarraconense detalló que las instalaciones contaban con un nuevo sistema de comunicaciones vía radio digital. Sin embargo, los fallos entre emisoras han dejado de ser un hecho puntual. «Ha habido varias patrullas que se han quejado de la imposibilidad de contactar con la central cuando estaban de servicio y eso es muy perjudicial», añade. La principal preocupación del sindicato radica en el hecho de que «un agente corre riesgo, si ante una situación de emergencia, no puede pedir refuerzos, a la vez que es vital para la seguridad de la ciudadanía». En este sentido, el delegado sindical explicó que, ayer mismo, se dio una de estas situaciones. «Durante la detención de una persona, los agentes se han encontrado con que no podían contactar con la central y no han podido pedir más refuerzos». Aunque los agentes han podido detener el perseguido, Pallàs destacaba que «si eso te pasa cuando persiguen a un grupo de personas la cosa se puede complicar y ser peligroso para el agente». Con respecto a las repetidas reclamaciones del cuerpo, el agente explicaba que «en varias reuniones, el concejal nos había explicado que estaban trabajando para pasar a formar parte de la Xarxa Rescatde la Generalitat, Radiocomunicaciones de Emergencias y Seguridad de Cataluña, pero no podemos esperar más».

En segundo lugar, el sindicato mayoritario de la Guardia Urbana también lamentaba que «los problemas de climatización de los vestuarios tampoco están resueltos. Se pueden llegar a superar los 30 grados, en su interior». Dos semanas atrás, sin embargo, desde el Ayuntamiento también habían manifestado que se había instalado aire acondicionado en los vestuarios de la comisaría. Asimismo, explicaron que habían equipado con ordenadores portátiles a los vehículos policiales y smartphones con el fin de permitir el uso de aplicaciones y el acceso en internet, con el objetivo de desarrollar con más agilidad el trabajo de los agentes.

Por otra parte, desde el sindicato reconocieron que el consistorio ya estaba cumpliendo con el reparto de chalecos antibalas. «Hace unas semanas que las están repartiendo entre todos los trabajadores, después de meses que lo esperábamos», añadían.